La nueva formación de Tercera Autonómica debutó en Liga con un 8-0 y más de seiscientos aficionados, incluidos antiguos peñistas del club desaparecido
15 sep 2014 . Actualizado a las 11:11 h.El fútbol es un estado de ánimo, dicen los filósofos que se mueven en torno al deporte rey. En Ourense, la decepción tras la muerte del histórico club de O Couto se ha visto mutada por la ilusión, coincidiendo con los primeros pasos de la Unión Deportiva.
Son dos sensaciones contrapuestas, pero ayer se podía notar un brillo en los ojos de muchos de los peñistas y aficionados de aquel equipo rojillo, volcados ahora en el apoyo a su nuevo escudo. Porque así lo ratificaron personándose en el céntrico campo de Os Remedios, para vivir esa histórica cita, el estreno del recién nacido ante el Razamonde, en la apertura del grupo 13 de la Tercera Autonómica.
La fiesta fue completa, porque la Unión ganó, de modo tan holgado como refleja el 8-0 final, se vistió de primer líder del curso y agradó a sus numerosos seguidores -ya van más de 500 socios- y en las gradas se contabilizaron más de 600 incondicionales. Lo que se dice un inicio halagüeño.
Y lo cierto es que se palpaba algo así después de los primeros indicadores. Cabe recordar que el club surgió del empeño de la Plataforma SOS CD Ourense, con presencia de muchos de sus entonces compromisarios, que apostaron por el formato del accionariado popular con la máxima «Cada socio un voto».
A ese proyecto lograron que se subieran figuras importantes en la historia del ourensanismo, como el doctor Cabaleiro -otrora carismático galeno del club- o los propios integrantes del colectivo de exjugadores de la entidad, que se encargarán de la parcela técnica. Precisamente fue su presidente, Carlos Bericat, el designado para protagonizar ayer el saque de honor previo a la contienda liguera.
En la tribuna de la instalación deportiva, la herencia rojilla también era manifiesta, con cientos de camisolas del conjunto cuya sociedad anónima deportiva está a punto de ser liquidada en los próximos días. Pero sus portadores las vistieron con la alegría de que el relevo ya está en marcha. Por eso las peñas rojillas firmaron su respaldo a la Unión en los días previos y por eso su hinchada se concentró minutos antes en la Cafetería Pabellón, para recibir como se merecían a aquellos deportistas -en algunos casos ilustres veteranos- que se han brindado a la nueva empresa. Los Héctor, Julio Álvarez, Lucas Nieto, Ramón Dacosta, Xurxo, Fran, Diego Soto, Xaco, Adolfo, Roberto Almeida y Julio Salgado ya tienen una página destacada en el balompié ourensano.
Almeida, abrió el marcador con el primero de sus dos goles y tanto Xaco como Xurxo anotaron por partida triple. Fueron los más vitoreados, como fue recordada también esa rivalidad con el renombrado Ourense CF, insistiendo mediante cánticos en que no conseguirán apropiarse del legado de O Couto, aunque ya lideran la Primera Autonómica tras las dos jornadas iniciales. Sal y pimienta.
El colectivo de exjugadores ourensanistas se encarga de la parcela técnica