El Lalinense consiguió ayer el pasaporte para las semifinales de la Copa de la Xunta por la puerta grande. Los rojinegros no dieron opciones al Octavio para vencer de manera clara por un 34-23, después de dejar sentenciado ya el encuentro en los primeros minutos. Los vigueses en ningún momento consiguieron plasmar sobre la pista del Arena que se encuentra en una categoría superior al Lalinense.
Los primeros minutos del choque fueron de intercambio de golpes entre ambos conjuntos pero con los vigueses mandando en esos compases iniciales en el marcador, pero sin conseguir distanciarse, aprovechándose de algún error en el pase de los locales. Sin embargo, con un Durán imponente en la portería y apretando en defensa, con varias recuperaciones de balón que fueron aplaudidas por el público, los lalinenses consiguieron ponerse por delante por primera vez en el minuto 8 con un tanto a la contra de Ramón (5-4)
El ecuador de la primera parte
Sin embargo, el punto de inflexión llegó en el ecuador de esa primera parte, después de una recuperación de Tate en defensa que acabó con un gol de Ramón a la contra. De nada sirvió, la petición de un tiempo muerto por parte del técnico del Octavio. Un parcial de 4-0 precisamente basándose en las defensa y rápidas contras puso por delante 11-7 a los rojinegros -ayer de verde- en el 18. Aunque, el Octavio aprovechó una exclusión de Pachi para recortar hasta los dos goles, en los cinco minutos finales de la primera parte con Losón y Asser marcando se fueron con 17-11 de ventaja.
El arranque de la segunda parte siguió el mismo guion que la parte final de los primeros treinta minutos, hasta que un gol de Josiño puso 20-11 en le marcador. El Octavio no conseguía reducir distancias con un Borja que se había convertido en el auténtico motor del equipo. Así, ya poca historia tuvo el encuentro, siguiendo con la misma dinámica.
El Lalinense había planteado el partido como un test para medir también sus posibilidades y, sobre la cancha, demostró que puede tutear a cualquiera con un conjunto que, además, ofrece amplias posibilidades de recambio en su banquillo para mantener la intensidad durante los sesenta minutos.
Marcador cada 5 minutos: 3-4, 5-4, 7-6, 11-8, 13-10, 17-11 (primera parte); 20-12, 24-14, 25-16, 27-20, 31-22, 34-23 (final.
Árbitros: Pablo Álvarez y Lucas Crespo. Excluyeron a Tate, Porto (2) y David por el Lalinense y a Córcera, Borja, Hermida, León y al técnico del Octavio.
Incidencias: Partido ante unos 200 espectadores. Se guardó al principio un minuto de silencio por Chamorro.
Durán, Mouriño, Josiño (1), Ramón (8), Gustavo (6), Losón (4), Asser (3), Martín (3), Bruno, Tate (3), Pachi (5), Porto, Coke, José, David (1)
Lloria, Córcera (4), Daniel, Conde, Borja (6), Rubén (6), Hermida (4), León (1), Veiga, Molins (2), Ballesteros, Silva, Salazar, Gregorio