Julio Rey jugará en Segunda B con el filial del Espanyol

Pablo Penedo Vázquez
Pablo Penedo VILAGARCÍA/ LA VOZ

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Julio -izquierda- ha firmado una excelente pretemporada.
Julio -izquierda- ha firmado una excelente pretemporada. cedida< / span>

El vilagarciano firmó ayer la ficha profesional, de la que espera beneficiarse el Arousa como club de origen

22 ago 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

El fútbol vilagarciano acaba de poner una nueva pica en Flandes. Un año después de recalar en la cantera del RCD Espanyol, a la que llegó procedente del Arousa como juvenil de último año, Julio Rey firmaba ayer su primera ficha como futbolista profesional con la segunda plantilla periquita. Con ella el mediapunta debutará en la Segunda B.

Por dos temporadas con opción a una tercera había desembarcado hace un año el ex arlequinado en la fábrica de nuevos talentos del RCD Espanyol. Un contrato que le aseguraba sobre el papel al menos una temporada en el equipo filial. Pero llegados a este punto, ambas partes sabían perfectamente que una vez completada la etapa de formación el futuro del gallego podría no pasar necesariamente por continuar vistiendo la camiseta españolista. La opción de una cesión, que bien podría haber mandado a Julio Rey a un Tercera, por ejemplo, estaba sobre la mesa como para cualquier otro futbolista en su situación, a expensas de lo que decidiese el entrenador del RCD Espanyol B.

El vilagarciano ha aprovechado el último mes para convencer a Lluís Planagumà de que tiene cabida en el nuevo proyecto periquito en la Segunda B. El técnico llegaba el pasado mes de junio al cargo tras tres campañas en los filiales del Villarreal en sustitución de Sergio González. El rendimiento durante la pretemporada de Julio resultaba, pues, fundamental de cara a conseguir plaza en un equipo aparentemente reforzado para hacer cosas importantes en la Liga de Segunda B.

En su haber el vilagarciano contaba con una extraordinaria primera temporada en el Espanyol, en cuyo equipo de División de Honor Juvenil se ganó la titularidad sin discusión, cerrando el ejercicio con 8 goles y el mayor registro de asistencias de una plantilla subcampeona de Liga en el grupo catalán y cuartofinalista de la Copa del Rey.

Julio Rey volvió a demostrar durante la pretemporada del Espanyol B sus dotes privilegiadas para la asistencia de gol, así como su desparpajo y frescura. Ahora deberá pelear duro para ganarse minutos en la Segunda B. Que juegue al menos 45 minutos en 10 partidos lo beneficiaría a él, y a un Arousa que recibiría entonces una importante cantidad de dinero por objetivos.