Nadal y el único muro que le queda por saltar: Roger Federer

Colpisa

DEPORTES

VINCENT KESSLER

Tras ganar su noveno Roland Garros, el balear sólo tiene por delante los 17 grandes del suizo para convertirse en el mejor de la historia

10 jun 2014 . Actualizado a las 00:32 h.

La imagen en la que se ve a Rafa Nadal con los ojos vidriosos mirando al horizonte parisino mientras sujeta con fuerza la Copa de los Mosqueteros, como el que porta su tesoro más preciado, ha dado la vuelta al mundo. Esa imagen simplifica la pasión del balear por el tenis. Unas lágrimas en el rostro que se han transformado en una sonrisa. Con ella ha posado este lunes delante de decenas de fotógrafos y televisiones.

Destila ilusión por los cuatro costados. Es, en definitiva, hambre a pesar de lo logrado. Es continuar aceptando retos. Y el principal es uno mayúsculo: superar los 17 títulos de Grand Slam de Roger Federer, el mejor tenista de todos los tiempos. El otro, está más al alcance de su mano, es retener el número uno. «Lo que me motiva es mantener la máxima intensidad. Ya veremos al final. Sé que sólo tres jugadores han llegado a 14. Es algo que nunca me lo podía haber planteado», explica, Nadal, desde ya nueve veces campeón de Roland Garros. Sus números están ahí. Con 28 años tiene ya 14 grandes y cuerda para rato de cara a nuevas adquisiciones

«Va a superar los 17 Grand Slam de Federer. Estoy convencido de que va a pasar esa cifra. Es joven todavía y como hemos visto en Roland Garros, va a ganar más», afirma el tenista Pablo Andújar. Desde luego, no es aventurero pensar que en París puede conseguir algún otro título. «Lo de Nadal en Roland Garros es una supremacía increíble», confirma Andújar. Un currículo que puede ampliar también en hierba -en dos semanas comienza Wimbledon- y en pista dura.

«El físico tarde o temprano dejará de funcionarle. Pero, si le respeta, le quedan de ocho a 12 Grand Slam de forma competitiva. ¿Por qué no va a llevarse tres o cuatro?», se pregunta el extenista Roberto Carretero. De esos problemas que puede acarrearle su físico se lleva hablando mucho tiempo. Sin embargo, Rafa Nadal, pequeños problemas con la espalda aparte, no da síntomas de flaqueza. Es su mente la que sigue teniendo la supremacía en su tenis. «Mientras él siga sintiendo la competición como la siente, no tiene límites», explica Carretero. «El límite está cuando pierda la ilusión por competir, por ganar. Cuando pierda obviamente la parte física pero, sobre todo, esa parte anímica y mental », amplía Andújar.

Apretado número uno

Con esa mentalidad por bandera aspira a lo más grande, a superar a Federer, y también a perpetuarse en el número uno del mundo. Pese a que tras la cita parisina Djokovic ha reducido las distancias a solo 170 puntos, a partir de ahora Nadal sólo va a ampliar la distancia a corto plazo. En Halle, donde juega esta semana para adaptarse a la hierba, no defiende ningún punto. Pero es en Wimbledon donde puede abrir brecha, ya que defiende 10 por los 1.200 del serbio.

Es, en definitiva, otro reto más. Nadal ha superado la primera frontera, la que le ha convertido en un deportista y un tenista memorable. Ahora tiene que sobrepasar la segunda, la más grande: ser el mejor de todos los tiempos. «Nunca habrá otro como Nadal. En España no vamos a ver esto en la historia», resume Carretero.