El Real Madrid golea a Osasuna y Cristiano recupera sensaciones de cara a Múnich

Colpisa

DEPORTES

ANDREA COMAS

El portugués jugó una hora y marcó dos golazos con la derecha desde fuera del área que pusieron en pie al Bernabéu y acabaron con el temor de Ancelotti a un partido trampa

27 abr 2014 . Actualizado a las 15:50 h.

Le inquietaba sobremanera a Ancelotti que el reciente duelo ante el Bayern en el Bernabéu, y el que se avecina en Múnich, se llevasen por delante el choque ante Osasuna. También el festejo inicial del Real Madrid, con la plantilla ofreciendo la Copa del Rey a la afición, animaba a distraerse y a perder de vista una cita clave para que los merengues sigan con opciones de conquistar el triplete y presionen al Atlético, todavía líder. El propio técnico evidenció que pensaba más en los bávaros que en los navarros al realizar hasta seis cambios, incluido el del portero, con respeto al primer asalto de la semifinal continental.

Minutos de descanso para los defensas Carvajal, Pepe y Coentrao, para el timonel Xabi Alonso y para Benzema, que acabó el miércoles con un golpe en la rodilla. La diferencia de presupuesto y de fondo de armario entre ambos equipos es tal que el once del Real Madrid estaba más que capacitado para golear al de Osasuna, que se presentó todavía más necesitado de puntos tras la victoria del Getafe ante el Málaga pero jugó sin convicción, sin alma y sin manejo de ambas áreas. Además, estaba Cristiano Ronaldo con enormes ganas de demostrarse a sí mismo, a la afición, a los médicos y a la crítica que está físicamente bien y sin riesgo de recaída porque la rotura de fibras ha cicatrizado. La capacidad intimidatoria del portugués sobre las defensas rivales no ofrece dudas y sabido es que su pegada es descomunal como atesoran los 30 goles en esta Liga.

La idea de Javi Gracia era aguantar bien los primeros minutos y de forma paulatina ir creciendo a medida que la mirada de los madridistas se dirigiera hacia Alemania. Pero su plan quedó hecho trizas pasados los cinco minutos. Cristiano salía de fuera de juego cuando recibió en la zona de medios, avanzó sin que nadie le saliera al paso y lanzó un enorme disparo desde fuera del área que sorprendió a Andrés Fernández porque el balón pareció rozar en Damiá antes de trazar una trayectoria parabólica. El lateral de Olot (Girona) cometió dos graves errores: salir tarde y girar la cara cuando el Balón de Oro armó el disparó que supondría su gol centenario en la Liga después de 81 partidos.

Bale, en la grada

Estuvo mucho más activo el luso que ante el Bayern. Se entendió bien con Morata, de más a menos, y sobre todo con Marcelo, al que le dejó una autopista en muchas fases al trazar diagonales hacia el centro

Con Gareth Bale fuera de la convocatoria porque todavía se siente débil tras sufrir un proceso vírico, Carletto alineó a Morata pero mantuvo el 4-4-2 que tanto éxito le dio en los excitantes duelos ante el Barça, en la final de Copa, y el Bayern. En realidad, el Madrid empleó ese dibujo cuando defiende y lo transformó en un 4-3-3 cuando atacó. La titularidad de Isco permite pensar que será suplente en el Allianz Arena. Una decisión discutible porque con el malagueño ha mejorado el Madrid sus prestaciones.

Sin necesidad de acelerar pero con una actitud muy profesional, el segundo de la Liga pudo cerrar el choque ya antes del descanso. Lo evitó Andrés, atento y seguro para detener los lanzamientos de Modric y Marcelo.

Había tranquilidad en la grada hasta que Cristiano hizo un gesto de dolor. Saltaron las alarmas pero sólo fue un golpecito. Al poco de reanudarse el choque, CR7 volvió a sacar máximo provecho de la debilidad de la zaga rojilla. No le encimaron y lanzó un obús con su empeine que entró por la escuadra. Sencillamente, colosal. Cuando se fue sustituido, el Bernabéu se puso en pie. En plena fiesta local, Sergio Ramos recibió el premio a su constancia. Llevaba tiempo deseando marcar un gol para dedicárselo a su futuro bebé y lo logró de gran testarazo. Quedaba un postre suculento: el medido centro de Isco que cabeceó Carvajal, quien entró durante la segunda parte, como Alonso y Casemiro. Los navarros lamentaron casi más les lesiones de Loé y de Armenteros que la derrota, y los madrileños son felices porque llegarán pletóricos a Baviera y presionan al Atlético.

Ficha técnica:

Real Madrid: Diego López, Nacho, Ramos, Varane, Marcelo, Di María (Carvajal, min. 73), Modric (Xabi Alonso, min. 67), Illarramendi, Isco, Morata y Cristiano (Casemiro, min. 61).

Osasuna: Andrés, Damià, Flaño, Arribas, Joan Oriol, Cejudo, Raoul Loé (Oier, min. 58), Puñal, Armenteros (Lobato, min. 77), De las Cuevas y Oriol Riera (Acuña, min. 63).

Árbitro: Fernando Teixeira Vitienes (Comité Cántabro).

Goles: 1-0: min. 6, Cristiano. 2-0: min. 52, Cristiano. 3-0: min. 60, Ramos. 4-0: min. 84, Carvajal.

Incidencias: Una lamentable pelea entre aficionados de ambos equipos dejó cuatro heridos leves frente al Bernabéu. Los rojillos hicieron pasillo a los blancos, que dedicaron el título de Copa a su afición. Se guardó un respetuoso minuto de silencio en memoria de Tito Vilanova. No se llenó el Bernabéu. 35ª jornada de Liga.