Alejandro Valverde arrasa en la Flecha Valona

Efe

DEPORTES

FRANCOIS LENOIR

El murciano se muestra imparable en el Muro de Huy y conquista su segundo triunfo en la clásica belga

23 abr 2014 . Actualizado a las 19:25 h.

Alejandro Valverde (Movistar), frío y calculador, logró el tercer triunfo consecutivo español en el Muro de Huy y su segunda victoria en la Flecha Valona, la segunda batalla de las Ardenas, en la que el murciano hizo valer su remate final ante todos los favoritos, excepto Purito Rodríguez, derrotado por una caída a 3 kilómetros de meta.

Discutido por su sentido táctico, esta vez Alejandro Valverde estuvo imperial, oportuno y devastador en su ataque final. Aguantó los ataques del irlandés Daniel Martin (Garmin) y del polaco Michal Kwiatwkowski (Omega) en el último tramo del Muro de Huy, y remató a ambos con un acelerón definitivo a 150 metros de la línea de meta.

Por allí cruzó Valverde con tiempo para la celebración y el deleite. Era su segunda victoria en tan mítica cima. Ya ganó en el 2006. Su éxito españoliza Huy, ya que sus antecesores en el palmarés eran Dani Moreno y Purito Rodríguez. Esta vez el madrileño solo noveno y el catalán, aliado del infortunio, repitió la caída de la Amstel.

Valverde invirtió 4h.36.45 en el trayecto de 199 kilómetros entre Bastoña y Huy. Mereció la pena el esfuerzo por una conquista que llega a cuatro días de la decana Lieja-Bastoña-Lieja, donde el líder del Movistar buscará el triplete. Detrás de él, entregados, dos rivales de postín. Ni Martin, ni Kwiatwkowski pudieron con el ataque del español. Tampoco el holandés Mollema, el primer en atacar en los 1,3 kilómetros finales, cuando las cuestas empiezan a resultar imposibles.

No fue el día de Dani Moreno, que se quedó huérfano de Purito, tampoco del belga Gilbert, el conquistador del Caubert en la Amstel, solo tres días antes. Todos llegaron juntos a la hora de la verdad, pero ante la mejor versión de Valverde ninguno pudo hacer nada, que aún entró con 3 segundos de adelanto.

Octava victoria de la temporada para Valverde, de 33 años, a punto de finalizar el primer ciclo de la preparación que le debe llevar a competir con los mejores en el Tour de Francia. En una temporada brillante, de momento las cifras le avalan. Huy fue testigo de una hazaña de categoría. Por el nombre del trofeo y por la exhibición ofrecida. «Esta victoria significa mucho para mí porque se me resistían las carreras en las Ardenas desde hace unos años. Iba con mucha rabia, me encontraba muy bien, el equipo ha trabajado fenomenal y al final he podido ganar», señaló tras imponerse en el Muro de Huy.

«No quería quedarme encerrado y empecé a subir delante y atento a los movimientos. En los últimos 300 metros me vi cerca de las vallas y no podía salir, pero en cuanto encontré un hueco arranqué y pude hacer una diferencia que me permitió ganar», explicó. Valverde

La prueba se decidió en la tercera y última subida a Huy. Antes se encargaron de amenizar el trayecto Navardauskas (Garmin-Sharp), Van Hecke (Topsport Vlaanderen) y Clarke (UnitedHealthcare), que avanzaron hasta 9 minutos respecto al pelotón. Los equipos de los favoritos echaron abajo la fuga, aunque aún aguantaron el tirón Navardauskas y Van Hecke hasta 12 kilómetros de meta. Ahí empezaron a moverse las fichas. El Katusha iba en mayoría con Losada, Kolobnev, Moreno y Purito, y Movistar contó con un gran trabajo de Herrada.

Eliminado Purito por una caída sin consecuencias físicas, Mollema seleccionó el grupo que se iba a disputar la carrera, ya en Huy. Kwiatkowski reventó a unos cuantos, y Martin vio el cielo abierto, pero la llave del paraíso la traía Valverde. Tercer triunfo español consecutivo.