El Ourense rifa el coche en el que publicitaba sus partidos

Luis Manuel Rodríguez González
LUIS M. RODRÍGUEZ OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

Santi M. Amil

Es un vehículo matriculado a nombre del club en el año 2008

22 abr 2014 . Actualizado a las 07:05 h.

La viabilidad económica del Club Deportivo Ourense continúa en entredicho y, si sus rectores siguen sin cumplir los compromisos adquiridos con todos sus asalariados, además de otros acreedores, las soluciones apuntadas son peculiares, cuando menos.

El Sorteo Impulsa fue anunciado como parte importante de un movimiento para recaudar fondos para el equipo, en colaboración con distintos centros comerciales de la ciudad. En un principio no se hicieron públicos los premios, ya que se adelantaba que la lista se iría ampliando a medida que se captara a nuevos colaboradores.

Semanas más tarde, se ha publicado en Internet una relación con «14 premios y subiendo», en la cual también se explica qué firma aporta cada regalo. El que encabeza la nómina es, según el relato textual: «Peugeot 107, del año 2008, como nuevo». Lo aporta el propio club. Es de hecho uno de los escasos bienes materiales de que dispone la entidad.

En su día fue el fruto de una gestión con el concesionario ourensano de la marca, por entonces patrocinador principal del equipo, que lo cedió en el marco de su acuerdo publicitario. La junta directiva que presidía entonces Juan Pérez, decidió matricularlo a nombre del Club Deportivo Ourense en el mes de septiembre y se utilizó, sobre todo para dar publicidad a los partidos del equipo. Fue el veterano Eduardo Gamallo el que lo utilizó en más ocasiones, si bien también sirvió para desplazar material y, en épocas posteriores, para otros viajes.

El sorteo ourensanista tomó el modelo de la Tómbola Solidaria del Zamora CF, que ha logrado reunir un total de 35.000 premios, convirtiéndose en un éxito sin precedentes en la historia de un club que en la pasada temporada pasó por un auténtico via crucis por mor de las deudas.

De momento, en el Ourense se han desvelado, además del automóvil, recompensas como un viaje de cinco días (a un destino sin determinar), dos noches en suits de hoteles locales, dos relojes y dos cenas en distintos restaurantes.

También es cierto que la iniciativa de los gestores de la entidad rojilla se perfiló demasiado tarde, cuando arreciaban las reivindicaciones de jugadores y empleados, al acumularse los salarios pendientes de cobro.