La fortuna esquiva del pobre

OURENSE CIUDAD

21 abr 2014 . Actualizado a las 06:00 h.

El Ourense es el pupas de la Segunda B y es que un torneo de estas características es de por sí complicado, pero si no se hacen las cosas bien, es un infierno. Plantilla y técnicos siguen abatidos, porque los que no cumplen tienen más que decir. En vez de soluciones, los futbolistas siguen oyendo mentira tras mentira y la paciencia da lo que da, sobre todo si se empina el camino. Con un equipo en cuadro, tuvieron los arrestos de sobreponerse a un 2-0 en contra, recortar distancias y arrinconar a una escuadra que venía lanzada hacia los puestos privilegiados del grupo. Fueron los zamoranos los que vivieron en medio de las llamas el pasado curso, pero tuvieron la suerte de que alguien enderezó esa situación caótica. ¿Cuándo caerá ese gordo en Ourense? Quizás el club ya no disponga de tiempo suficiente.