Perdió dos puntos a falta de diez minutos frente a un entonado Marino
31 mar 2014 . Actualizado a las 11:59 h.Contra viento y marea, el Ourense ha sido a lo largo de todo el curso un equipo fiel a su idea balompédica, pero si la falta de gol le ha costado puntos clave, ayer que deleitó a su público durante buena parte del encuentro, no fue capaz de cerrar una mínima ventaja, el día que había cantado dos anotaciones frente al Marino de Luanco.
El enfrentamiento comenzó con dos equipos que se gustaban, sobre un césped que por fin estaba al gusto de la escuadra local, la cual intentaba llegar al área de Rafa Ponzo desde el pitido inicial. Y tardó solo cinco minutos en celebrar un gol, el primero del ariete Óscar Martínez en el torneo regular. Fue tras una brillante acción de Jaime Noguerol, presente en casi todas las triangulaciones de los rojillos, como la que selló otro remate de Javi Hernández, con magnífica respuesta de Ponzo.
Pero su enemigo asturiano también sabe qué hacer con el esférico, como ha demostrado en las últimas jornadas, hasta llegar a la cuarta posición del grupo. Los de Quirós ya habían lucido sus cualidades, pero se vieron reforzados por el éxito de su primer disparo a puerta, cuando Dani Pevida fusiló a Pato tras una perfecta dejada de cabeza de Álvaro Muñiz.
Parecía un golpe duro para los de casa, pero no se amilanaron los de Luisito. Javi Hernández era una pesadilla cada vez que recibía un pase a su desmarque y el salmantino sirvió primero a Óscar en una acción que desbarató de nuevo el meta forastero, antes su precioso tanto, con un trallazo seco que pegó en el poste antes de llegar a la red, después de un potente forcejeo en carrera con su marcador.
Aún pudo ser Javi H otra vez decisivo, pero no llegó por poco al centro de Óscar, tras una incursión de Álex en una jugada que se desarrolló entre olés de los asistentes a O Couto, que respondía así al buen fútbol de su equipo, que sin embargo se fue al descanso con el susto de un lanzamiento de Titi se le fue lejos de los palos.
Ni uno ni otro equipo movieron el cuero con la misma frescura después del intermedio y aún así Alegre puso a prueba a Ponzo desde el pico del área. En esa dinámica seguía cómodo un Ourense que seguía llegando el peso, mientras el Marino agotaba sus cambios. Entonces reincidió el cuadro de Luisito en la es su cruz todo el año. Hasta tres disparos envenenados de Adrián Cruz, dos de ellos con intervención de Ponzo, pudieron matar la disputa, pero fue el inquieto Titi el que culminó con el empate un veloz contragolpe luanquín.
Faltaban 10 minutos y un once agotado fue incluso capaz de forzar el remate a la media vuelta de Gustavo, que despejó el portero a bocajarro. Tras algún susto en la estrategia, el tiempo se agotó y volaron dos puntos.
Goles: 1-0, min 5: Óscar Martínez; 1-1, min 12: Dani Pevida; 2-1, min 26: Javi Hernández; 2-2, min 80: Titi.
Árbitro: Sánchez Laso, del comité extremeño. Expulsó a Iker Alegre (min 92) y amonestó a Álex, Capi, Campillo; Álvaro Muñiz, Pevida y Dudi.
Incidencias: O Couto (Ourense). Unos 2.500 aficionados.
Pato, Campillo, Álex, Pablo Corzo, Capi, Yebra (Borja Valle, min 85), Adrián Cruz, Iker Alegre, Noguerol, Javi Hernández (Gustavo, min 76)
y Óscar Martínez (Adil, min 63).
Rafa Ponzo, Pablo Suárez, Guaya, Omar, José Ángel, Dudi, Álvaro Muñiz (Espolita, min 65), Titi, David (Jandrín, min 61), Dani Pevida y Chus Hevia (Diego, min 69).
Las mejores ocasiones del segundo período fueron para el plantel de O Couto