Al Conservas de Cambados le explotan las ollas a presión

Pablo Penedo Vázquez
Pablo Penedo VILAGARCÍA / LA VOZ

DEPORTES

MONICA IRAGO

Solo ha ganado uno de sus siete partidos resueltos por 7 o menos puntos de diferencia

18 feb 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Conservas de Cambados 67-73 Marín PeixeGalego, y ya van seis. Media docena de derrotas son las que lleva el conjunto dirigido por Yago Casal en los siete encuentros que esta temporada ha saldado con diferencias de 7 o menos puntos. Solo ante el Zornotza Saskibaloi Taldea, en su quinto partido de Liga con marcador final de 69-66 en el pabellón de O Pombal, el Xuven fue capaz de arrimar el ascua a su sardina, en el que resultó el colofón de un espectacular debut en la categoría que generó un espejismo en el entorno del club amarillo.

Aquel ajustado desenlace ante el Zornotza situaba en 3-2 el balance de partidos ganados y perdidos del Conservas de Cambados, capaz de arrancar con una más que digna derrota ante el Palma, 72-82, para endosarles sendas palizas al C.B. Prat, 53-81, y Ávila, 83-57, y caer por un punto, 66-65, en Marín tras un horroroso inicio en A Raña.

Lo que entonces pareció un accidente producto del nerviosismo del derbi se ha acabado convirtiendo en la tónica arrastrada por el equipo de Yago Casal. Superado a domicilio sin matices por el hoy líder, Fundación Baloncesto Fuenlabrada, 76-54, el Conservas de Cambados encadenó tres pinchazos que bien podrían haber acabado en inyecciones de adrenalina: con Cáceres (62-67), el colista Askatuak (69-67) y el CEBA Guadalajara (60-66). Finales apretados como los vividos en las dos últimas jornadas, en las que el cuadro arousano rindió notablemente por debajo de lo que se esperaba de él incapaz de gestionar con éxito sus puntos y desenlaces en Ávila, (61-54), y el pasado sábado en O Pombal con el Peixe, 67-73. La derrota en Cambados a manos del Amics Castelló en el primer partido del 2014, 85-93, es el apéndice a tan negro currículo, toda vez que la afición cambadesa acabó el partido convencida de que su equipo podía haber eludido felizmente una prórroga letal.

La falta de madurez de su plantel es la respuesta que sale de la boca del técnico del Xuven cada vez que se repite la historia, ante la que no parece hallar más solución que la de seguir trabajando día a día en el crecimiento del colectivo como equipo sólido de pies y de cabeza.

Los capitanes coinciden

Alberto Rodríguez y Lucas Vaquero, los dos capitanes del equipo, coinciden con Casal. «No estamos haciendo buenos finales de partidos», reconocía Chufi. «Solo hay que seguir trabajando», esa es su respuesta a un problema que, apunta, ya vivió en más de uno de los conjuntos de su dilatada carrera profesional. «No creo que haya que volverse loco», concluye, después de señalar que el derbi con Marín fue un duelo «de poder a poder, decidido por pequeños detalles, y que cualquiera de los dos mereció ganar».

En una línea similar Lucas Vaquero opta por trocar la inmadurez argumentada por su entrenador por «falta de experiencia». El base confiesa que «quizás nos faltó controlar partidos que teníamos controlados, ganando por 4-5 puntos a falta de un minuto». ¿El antídoto? «Trabajo y experiencia». Lo primero lo entrena el Xuven. De lo segundo acumula ya más de media docena de amargas experiencias.