Las ampollas en la mano, un problema inesperado para Nadal

Dpa

DEPORTES

FRANCK ROBICHON

«Si juego sin protección me la voy a destrozar», dice el balear sobre su mano izquierda, tras sufrir ante Nishikori

20 ene 2014 . Actualizado a las 22:25 h.

Más allá de la creciente peligrosidad de sus rivales, Rafa Nadal tiene un problema inesperado y añadido para la segunda semana del Abierto de tenis de Australia: su propia mano izquierda. «Si juego sin protección me la voy a destrozar», dijo el número uno del mundo acerca de la ampolla con que jugó en el duro 7-6 (7-3), 7-5 y 7-6 (7-5) sobre el japonés Kei Nishikori para avanzar a cuartos de final.

Relativamente disconforme con su juego ante el nipón, Nadal dijo no tener otra opción que ponerse tela protectora autoadhesiva en la mano con la que empuña la raqueta. «Si no, se me va a poner en carne viva, y si se me pone en carne viva, el torneo está en peligro», sintetizó el jugador, que admitió que la situación le genera incomodidad. «Un poquito de sensibilidad se pierde, sí. Pero no voy a ganar ni perder por eso», enfatizó.

«Sólo podría jugar con la mano dormida, pero ahí tendría mucha menos sensibilidad que con la mano con protección. Se me ha inflamado hace cinco o seis días y se me ha desinflamado ya. Pero ahora la parte de arriba se queda seca y muerta y la parte de abajo sube», explicó Nadal mientras mostraba su mano con un punto enrojecido en el centro.

«Cuando se abre la piel muerta, la parte de abajo está muy sensible», continuó explicando. «Tendría que recortar la piel muerta y dejar que la parte de abajo se desinflame, pero eso serían cinco días, y son cinco días que no tengo, porque jugamos cada dos. No creo que pueda jugar sin vendaje por el resto del torneo». Nadal reconoció que «el problema no es la ampolla, es el lugar». «Es muy difícil taparla, no es dolorosa, pero no puedo jugar sin esa venda y el tacto con la raqueta es un poco más complicado», confesó.

Nadal tendrá como rival el miércoles al ascendente búlgaro Grigor Dimitrov, por primera vez en su vida en los cuartos de final de un Grand Slam. El balear lo tiene muy bien estudiado, como a todos sus rivales. «Está destinado a estar arriba, tiene todo el talento para ser uno de los mejores y ganar torneos como este», dice Nadal. «Saca muy bien, tiene una gran derecha y un revés con slice espectacular. Con el liftado comete algunos errores, pero sólo algunos. Tengo que jugar con calidad, posición, ser agresivo. Como con (Gael) Monfils la otra noche, que pude hacerlo».

Más allá de las ampollas, Nadal también se quejó del árbitro. «Si estás jugando a 40 grados, no puedes esperar tener 20, 25 segundos para recuperarte. Si estás jugando intercambios de locura, no puedes tener 25 segundos para recuperarte, va en contra del espectáculo. Intentaré ser más rápido en el futuro, pero lo importante es tener gente en la silla que realmente entienda el juego y que la gente que gestiona este deporte entienda el juego. Estamos haciendo a los árbitros peores que antes», criticó Nadal en rueda de prensa, tras recibir una advertencia por retrasar el saque con con 4-4 y deuce.