Los Nadal y Federer del futuro

Nieves D. Amil
nieves d. amil PONTEVEDRA / LA VOZ

DEPORTES

RAMON LEIRO

Sanxenxo reúne en el torneo ITF júnior a 130 promesas de 60 nacionalidades

24 oct 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Las promesas del tenis que estos días compiten en el Torneo ITF Júnior de Sanxenxo piensan en Nadal o Federer cada vez que golpean la bola. Todavía no lo hacen con la misma fuerza que ellos, ni por supuesto, con la misma técnica, pero trabajan para hacerlo algún día. La meta la tienen clara, el problema es lo duro que se plantea el camino para estar entre los mejores en el ránking mundial júnior.

Hasta 330 chavales de entre 15 y 18 años se inscribieron en el torneo de Sanxenxo, pero solo los 128 mejores participan en la prueba. De estos, un total de 64 -32 chicos y 32 chicas- pasaron a la fase final de este torneo, que puntúa para el ránking mundial júnior.

«Sanxenxo es la última oportunidad que tienen muchos de ellos para poder clasificarse para el Open de Australia porque es de los últimos torneos en los que se puntúa», señala Noli Álvarez, director deportivo del Círculo Cultural Deportivo de Sanxenxo.

La prueba de Sanxenxo forma parte del circuito de torneos que se disputan bajo la supervisión de la Federación Internacional de Tenis parta promocionar el deporte y establecer un paso intermedio hacia la profesionalización. Los Grand Slam -Roland Garros, Wimbledon, U.S. Open y Open de Australia- tenían cada vez a chicos más jóvenes que «no estaban preparados ni eran maduros para afrontar este circuito profesional, era un cambio muy brusco y este circuito es el paso intermedio», señala Álvarez.

Por las pistas de Sanxenxo pasan promesas de toda Europa. Compiten españoles, italianos, rusos, franceses, chipriotas, polacos, portugueses o suizos. Todos ellos dan forma a esta competición en la que participan más de 60 nacionalidades.

Un torneo con tanta historia como el de Sanxenxo es testigo de la evolución de la cantera. Noli Álvarez reconoce que si algo ha cambiado en los últimos años es la profesionalización de la categoría júnior. «Antes venían con sus padres y entrenaban cuatro días a la semana y ahora hacen vida de profesionales, muchos de ellos en centros de alto rendimiento», explica el director del torneo. Son jóvenes que compaginan a partes iguales su vida deportiva y la educativa. «Hay chicos que están entre los diez mejores de sus países», explica Noli Álvarez, que hasta el próximo domingo compartirá en Sanxenxo pista con las promesas del tenis mundial. Ahora ya solo golpean sus raquetas los que están más cerca de convertirse en Nadal. Y aún son 64.