Un ojo en Málaga y otro en Sevilla

Xurxo Fernández Fernández
xurxo fernández MÁLAGA / LA VOZ

DEPORTES

M.MARRAS

La plantilla mostraba ayer signos de euforia, contagiada por la confianza del entrenador

26 may 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

El centenar de aficionados que ayer despidió al Dépor en Alvedro se hartó de recordarle a la plantilla eso del «sí se puede». El reto de esta noche (20.00 horas, Canal Plus Liga y GolT) para los hombres de Fernando Vázquez es demostrar la certeza de la frase en solo hora y media. Tiempo suficiente para convertir en historia las turbulencias deportivas de la temporada y consumar el tan evocado milagro. Los blanquiazules afrontan la posibilidad de culminar la hazaña en tiempo récord. Si son capaces de vencer en La Rosaleda y el Betis no deja escapar un solo punto del Villamarín frente al Zaragoza, A Coruña volverá a ser ciudad de Primera la próxima campaña.

La confianza del técnico en la viabilidad de la carambola se ha propagado entre la plantilla, que ayer mostraba signos de euforia durante el trayecto a la capital andaluza. Si el plan sale redondo, el equipo al completo podrá festejarlo sin esperar a la vuelta a casa ya que el míster los ha convocado a todos.

Solo hay dos descartes seguros de cara al choque: Manuel Pablo, sancionado por acumulación de amarillas, y Marchena, que acelera su recuperación por si tuviera que estar disponible contra la Real Sociedad. Para cubrir la baja del canario, el entrenador maneja al menos dos alternativas. La más probable pasaría por cambiar de banda a Silvio y hacer sitio en la izquierda a Ayoze, al que ayer sus compañeros dedicaron un tímido «cumpleaños feliz» en pleno vuelo. Si el zurdo no es titular a sus 31, seguramente lo será Laure, que esta semana dio por terminado un proceso de recuperación de cinco meses, a cuenta de una pubalgia.

El último en recibir el alta médica, justo antes de salir hacia Málaga, fue Salomão. El luso podría tener también minutos en La Rosaleda, sobre todo si Pizzi continúa con sus molestias musculares. Riki es otro de los que no está en su mejor momento físico, así que es muy probable que Nelson tenga ocasión de ganarse sobre el césped (aunque no sea de inicio) el perdón de la hinchada blanquiazul tras su gesto de hace una semana.

El buen tiempo que se anuncia para la hora del partido y la ausencia de bajas en un rival que quiere despedir por todo lo alto a Pellegrini, son el resto de ingredientes para 90 minutos de fútbol con transistores que el Dépor jugará a dos bandas. El propio Vázquez reconocía el viernes que, sin descuidar la faena en Málaga, el equipo estará pendiente de Sevilla. Una buena noticia en ambos campos ataría esa permanencia que hace solo dos meses parecía intocable. Y con hora y media de adelanto.

«Hace unos meses, todos queríamos llegar a estas jornadas jugándonos la permanencia»

Futbolista del Dépor

«Es un orgullo dirigir a estos jugadores. Cuanto mayor fue la dificultad, más respondieron»

Entrenador del Málaga