El debut de Krohn-Dehli, la principal incógnita para visitar a la Real Sociedad
25 ago 2012 . Actualizado a las 12:33 h.Superada la ceremonia de bienvenida, el Celta ya asume las exigencias de la máxima categoría. Los vigueses afrontan esta tarde la primera salida del curso, para visitar a un compañero de penurias durante un trienio en Segunda como la Real Sociedad, y lo hace desde la necesidad de convertir en réditos el buen juego del estreno. En Primera las victorias morales enseguida pasan a la historia.
No obstante el partido con el Málaga sirvió para enseñar el camino que debe seguir el Celta hasta que tenga su plantel al completo. Herrera rescató su primera libreta celeste para apostar por un 4-4-2 para jugar a la contra. Todo indica que en Anoeta no cambiará de cuaderno, porque la idea funcionó y los jugadores, salvo Álex lo que pasó mal arrancado desde la banda zurda, se sintieron cómodos con un guion que combinaba posesión y contragolpe.
Con respecto a la puesta de largo la única novedad la representa Krohn-Dehli que ha entrado en una convocatoria de 19 jugadores pero que no está nada claro que vaya a jugar con tan solo dos entrenamientos encima. El danés parece la solución a los problemas en el lado siniestro, pero Herrera viajó a Guipúzcoa sin la decisión tomada a cerca de su alineación.
Las prestaciones de Augusto
En una situación parecida lo hizo siete días atrás con Augusto Fernández y el argentino respondió. Ahora con una semana más encima, el Negro ya debe dar un paso al frente desde el costado derecho.
Con esta escenografía, la apuesta más lógica apunta incluso a repetir el once del estreno con Iago Aspas y Quique de Lucas como jugador más adelantado. El catalán siempre comienza como uno moto y es el momento de aprovecharlo. Atrás, nada anuncia ninguna clase de movimiento salvo la posición final de Álex López.
Porque en Anoeta el dibujo del Celta se encuentra con un problema considerable. A la Real Sociedad no le gusta el contragolpe del rival. Por eso esperan muy arriba para robar y hacer contras cortas en donde su cuarteto de ataque se ponga las botas. Reducir las pérdidas al máximo y finalizar las jugadas, uno de los debes del cuadro celeste, son el mejor antídoto, aunque de difícil concreción.
El partido con la Real también será un termómetro para ver cómo se encuentran los vigueses a los rivales escaldados por el Barça. Recoger equipos enrabietados no parece lo más recomendable pero así lo ha querido el calendario.
De entrada, Montanier, que apenas ha enseñado sus cartas para la Liga, cuenta con todos su arsenal, puede dejar en el banquillo a un hombre como el mexicano Carlos Vela y contará con Anoeta como gran aliado. Allí siempre se han hecho fuertes los Txuri Urdin. Un escenario que tradicionalmente tampoco se le ha dado demasiado bien a los celestes.
Pese a todo, no hay mejor momento para invertir la tendencia. Recién llegados y con la necesidad de sumar los primeros puntos de la temporada para comenzar a crecer. Será el último partido en donde el plantel del Celta presente lagunas y quizás la última probatura hasta que Paco Herrera se reúna consigo mismo para elegir el camino de la permanencia. Con un triunfo sería mucho más fácil.