Terminó la Eurocopa 2012 y Francia ya está cerrando acuerdos para organizar la del 2016, en la que competirán 24 selecciones en lugar de las 16 de esta última fase final. Para entonces se asegura que las nuevas tecnologías estarán incorporadas en ayuda de los árbitros. La Eurocopa 2012 es agua pasada para unos aficionados que siguen con sed de fútbol, nunca saciada por ese hincha que sale de un partido pensando ya en el próximo. Si ganó su equipo, por ver como sigue ganando y, si perdió, con la esperanza de que se recupere. Es la eterna canción. El fútbol no termina sino que va a más. De ahí la urgencia de meterlo por cauces totalmente legales y, de una vez por todas, aclarar el destino que se le viene dando a los millones que el fútbol ingresa. En esta Eurocopa, a España le corresponden 23 millones por su triunfal participación que, en pesetas suman más de 3.800 millones, dinero que la Uefa paga religiosamente.
El fútbol no termina, al contrario, pues por aquí ya se palpa ansiedad por esa próxima Liga que está a la vuelta de la esquina. Antes, me tomaré un descanso, unas vacaciones de verano que, dicho así, suenan muy bien aunque también soy de los que esperan con ansiedad por la nueva temporada. Además, ¡en Primera División!