El Obradoiro acaricia la permanencia con un festival en Fuenlabrada

Francisco Balado Fontenla
Fran Balado REDACCIÓN

DEPORTES

Emilio Naranjo

El cuadro de Moncho Fernández completó su mejor partido de la temporada y se impuso con mucha claridad a un Mad-Croc en horas bajas

23 nov 2012 . Actualizado a las 17:19 h.

El Obradoiro completó un partido soberbio y venció, con una autoridad aplastante, al Fuenlabrada (63-82). De este modo, los gallegos igualan en victorias a su rival de esta tarde y obtienen el basketaverage particular frente a un Fuenlabrada en caída libre.

Hopkins, a sus 39 años, se convirtió en el jugador más valioso del partido al firmar 21 puntos de valoración. Si bien, sería injusto destacar un solo nombre, ya que todos los compostelanos rayaron a gran altura. El conjunto de Moncho Fernández practicó un baloncesto maravilloso, en el que siempre prima el colectivo sobre las estadísticas individuales. La victoria se volvió a forjar sobre una defensa solidaria, aunque en esta ocasión estuvo acompañada de un acierto espectacular en el aro rival. 

El equipo gallego no acusó la baja de Palacio, que no pudo estar en el Fernando Martín debido a circunstancias personales. 

Hopkins comenzó en su línea. El veterano asumió la responsabilidad en las primeras acciones ofensivas de su equipo. Canastas que parecen sencillas, pero que requieren de mucho trabajo. El Fuenlabrada entró en pista con dudas, y cuando estaba a punto de despejarlas apareció Bulfoni desde la línea de tres. Los gallegos ejecutaron a la perfección el plan diseñado por Moncho Fernández y ahogaron a las individualidades del cuadro local. El Obradoiro realizó un gran primer cuarto que le sirvió para hacerse con una pequeña renta (14-21). Después llegó la fiesta.

La escuadra gallega se aprovechó de la mala inercia de su rival y comenzó a transformar su gran partido en baloncesto champagne. Nguema aprovechó sus minutos en pista, Oriol, con una rodilla hecha trizas, impartió un clínic en la pintura, y Kendall se sumó a la fiesta para percutir el aro rival desde dentro y desde fuera. Sin duda, el Obradoiro, arropado por más de 200 fieles, realizó uno de sus mejores partidos del año en el Fernando Martín de Fuenlabrada. Porfirio Fisac trató de impedir que el partido concluyese antes del descanso, pero agotó sus tiempos muertos en vano. El Obradoiro ya había metido la directa y se retiró a los vestuarios con 16 puntos de ventaja (31-47).

El comienzo del tercer cuarto siguió con la dinámica de los anteriores y el Obradoiro pegó el hachazo definitivo llegando a colocarse a 26 puntos de ventaja. Kendall estuvo soberbio. Del Fuenlabrada, ni rastro del equipo que pasó por Santiago en la primera vuelta hecho un torbellino. Solo Mainoldi realizó un partido digno. 

En el último parcial, con el encuentro decidido, el Obradoiro comenzó a siestear y a elegir mal sus acciones de tiro. Los locales limaron gran parte de la distancia en el electrónico, pero ya era tarde. Por si acaso, Andrés Rodríguez se sacó un conejo de la chistera en forma de dos más uno y dejó claro que, aparte del triunfo, el equipo gallego había decidido que iban a regresar con el basketaverage particular en el bolsillo. 

Palacio recibió en la distancia el mejor homenaje de sus compañeros.

63 - Baloncesto Fuenlabrada (14+17+18+14): Colom (5), Laviña (7), Blanco (9), Mainoldi (14) y Diouf (2) -quinteto inicial-, Penney (3), Hall (5), Laso (2), Joseph (-), Cortaberría (2), Sánchez (12) y Muñoz (2).

82 - Obradoiro (21+26+22+13): Rodríguez (8), Bulfoni (10), Washington (4), Lasme (8) y Hopkins (14) -quinteto inicial-, Cabanas (-), Ere (5), Kendall (17), Junyent (7), Nguema (3) y Corbacho (6).

Árbitros: Juan Carlos Mitjana, Miguel Á. Pérez Pérez, y Castillo. Excluyeron por faltas personales a Hall en el minuto 38 por parte del conjunto local y a Washington en el minuto 39 por parte del conjunto visitante.