David Cal arranca su reto «imposible»

DEPORTES

Estudiará la pista de Londres, buscará fórmulas para mejorar fuerza y potencia sin perder resistencia y fabricará una «canoa voladora» para optar a otras dos medallas olímpicas

18 oct 2009 . Actualizado a las 02:41 h.

El martes comenzará la cuenta atrás para el reto imposible de David Cal: ganar otras dos medallas en los Juegos de Londres. El gallego viajará a Inglaterra, concretamente a la localidad de Eton, a unos 20 minutos de la capital londinense, donde está ubicada la pista en la que se disputarán las regatas olímpicas. Se trata de familiarizarse con un escenario desconocido y, al mismo tiempo, dar el pistoletazo de salida a una empresa que, si ya de por sí es difícil, ha adquirido tintes épicos e, incluso utópicos, con la decisión de la Federación Internacional (FIC) de sustituir la prueba de los 500 metros por la de 200.

David Cal y su entrenador, Suso Morlán, han decidido pelear hasta que la evidencia los rinda. De partida, no renunciarán a ninguna de las dos distancias a pesar de que la lógica dice que son incompatibles. Cuando se le pregunta a Cal si no le parece un reto imposible, responde: «Habrá que verlo. No parece fácil, pero yo ya he andado bien en velocidad. Lo quiero intentar. A ver el jefe [su técnico] cómo se las arregla para entrenar y ser competitivos en las dos carreras». Y en esas está el jefe, estudiando toda la bibliografía que se le pone por delante para sacar adelante la aventura.

PISTA OLÍMPICA

Cal viajará el martes y entrenará diez días en Eton

El tetramedallista olímpico estará en Inglaterra desde pasado mañana hasta el 1 de noviembre. Durante estos días estudiarán la pista de Eton College, ubicada en el lago de Dorney. Al mismo tiempo continuarán un trabajo que ya comenzaron en el Lérez. Se trata del año más pesado del ciclo olímpico, ese en el que Cal se meterá entre pecho y espalda 4.200 kilómetros de entrenamiento repartidos en 730 horas de trabajo en 48 semanas. «Haremos muchas series largas en el agua a intensidades molestas para David, ni muy lentas, ni muy rápidas. El año que viene tocará la intensidad», dice Morlán, que en este sentido ha planificado el ciclo olímpico de una forma similar al anterior.

RESISTENCIA Y VELOCIDAD

El biotipo del piragüista variará, con palistas más altos, musculados y potentes

Ante el nuevo escenario de los 1.000 y los 200 metros, Cal competirá en estas dos distancias en las diferentes citas del calendario. Renunciarán, por tanto, a los 500 metros. ¿De verdad irá a por las dos pruebas?, se le pregunta a Cal: «¿Entonces?», responde a la gallega. «Vamos en busca del equilibrio entre resistencia y velocidad. Si trabajas resistencia, perjudicas la velocidad; y al contrario. Quién sabe, igual no existe ese equilibrio que buscamos y lo tenemos que dejar, pero solo cuando veamos que no somos competitivos. Los cambios en las distancias acarrearán la aparición de más especialistas. El biotipo del piragüista en la distancia corta cambiará y aparecerán palistas más altos, pesados y musculados que antes. David, con su 1,83 metros y sus 84-86 kilos debería estar en inferioridad de condiciones. «Remar 1.000 metros equivale a la prueba de los 1.500 en atletismo. Y hacerlo 200, es el equivalente a los 400. No hay más que ver la morfología de los atletas que corren esas dos distancias para ver la tremenda diferencia», asegura Suso Morlán. «Pero, sin embargo, lo vamos a intentar», sostiene. Morlán trabajará para que David gane fuerza y potencia perdiendo la menor resistencia posible. En mil metros, la resistencia pesa más que la velocidad, mientras que en los 500 es al revés. Cal, en la combinación de ambas, era extraordinario. Pero en 200 desaparece la palabra resistencia y solo queda velocidad. «A lo mejor, estamos hablando de una ilusión y en dos meses desechamos los 200. Solo iremos a por ellos si no ponemos en riesgo nuestra gran competitividad en el 1.000. Ahora todo es incertidumbre, porque en cierta forma es como si aprendiera un nuevo oficio».

EL CALENDARIO

Mundial en Poznan, Europeo en Trasona y copas del mundo de Vichy y Duisburgo

En principio, en la presente temporada no habrá objetivos competitivos. El Mundial de Poznan no les quita el sueño, ni siquiera el Europeo que se disputará en su pista talismán de Trasona, aunque en este caso al ser en España intentarán acudir en situación de competir. Igualmente, Cal estará en la Copa del Mundo de Vichy, en Francia, escenario del Campeonato del Mundo del 2011, una cita trascendental porque es la que repartirá las plazas olímpicas para Londres. También están valorando la posibilidad de acudir a la Copa del Mundo de Duisburgo.

LA EMBARCACIÓN

Cal y su técnico trabajan en un proyecto de diseñar una canoa específica para velocidad

David Cal y su entrenador han iniciado un proyecto de diseño de un nuevo barco para la prueba de 200 metros. Se trata de hacer una canoa específica para ir a toda velocidad, con una navegación lo más rectilínea posible y que se deslice con el mínimo rozamiento. Se busca una canoa voladora, un barco que soporte una gran fuerza y frecuencia de palada y que permita no repalear. ¿Cómo hacerla? En ello están, con un proyecto en pañales en el que participarán piragüista, entrenador, ingenieros, fabricante y un laboratorio. Otro aspecto fundamental será la pala. Así como la reglamentación pone ciertas normas en cuanto a la piragua, no lo hace en la pala. Se supone que la misma será más grande, para desplazar todo el agua que sea posible. En definitiva, el ancho de la pala vendrá a ser como el desarrollo que mueven los ciclistas.

El reto es apasionante, con grandes dosis de épica y, por qué no decirlo, con ciertos tintes utópicos, aunque Suso Morlán insiste: «Igual nos estamos metiendo en algo que no tiene sentido». Mientras tanto, desde pasado mañana hasta el día 1 de noviembre, Eton College espera al campeonísimo gallego.