Los jueces puntuaron con un cero el último salto de la australiana Maddison Keeney
29 jul 2015 . Actualizado a las 18:55 h.El mundial de Natación de Kazán (Rusia) ha dejado una imagen inusual en la competición de trampolín de un metro. La australiana Maddison Keeney de tan solo 19 años tenía la posibilidad de alcanzar el podio con su último salto, pues era cuarta en ese momento, pero su salto fue de todo menos bueno.
La dificultad de la maniobra era de 3.2 y la acción consistía en dos volteretas y media hacia delante y un tirabuzón, pero se quedó en una zambullida propia de cualquier bañista en una piscina. La mujer se desestabilizó, impidiéndole alcanzar la altura suficiente para lograr su salto. La cara de su entrenador fue todo un poema, igual que la que se le debió quedar a Keeney cuando vio que todos los jueces le dieron un cero, desbaratando sus esperanzas de acabar entre las tres primeras.
La italiana Tania Cagnotto ganó la competición, seguida de las chinas Tingmao Shi y ZI he. Keeney pasó de tener posibilidades de acabar en el podium a terminar 12º. Para mayor desgracia, en la competición por equipos de salto la agrupación de Keeney terminó quinta, cuando era uno de los equipos favoritos.
En los XX Juegos de la Mancomunidad Commonwealth que se celebraron Glasgow, la australiana vivió una situación similar, cuando tenía opciones de conseguir un oro y un error la relegó a la segunda posición.