El «Mar interior» de Miguelanxo Prado cierra el año en el Museo de Pontevedra

C. Pereiro PONTEVEDRA / LA VOZ

CULTURA

RAMON LEIRO

La muestra resume sus 36 años de trayectoria a través de cien ilustraciones originales

13 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Dijo Miguelanxo Prado durante su presentación que «expoñer no Museo de Pontevedra é como expoñer na casa de Castelao, e para min é como a entrada nunha especie de olimpo transcendente para a nosa cultura». Desde las 20 horas de hoy, y hasta el 29 de enero, el Sexto Edificio del museo pontevedrés albergará un viaje ilustrado por los treinta y seis años de trayectoria del historietista y dibujante coruñés.

Mar interior es una retrospectiva a una carrera aplaudida y alabada como es la de Miguelanxo Prado, que ayer tanto el director del Museo, Carlos Valle, como el diputado provincial de cultura, Xosé Leal, quisieron calificar de «digno herdeiro de Castelao». Cien dibujos, cien miradas, son las que componen esta exposición con la banda diseñada como base, «unha das linguaxes artísticas nas que estamos aportando moitísimo, con autores e autoras actuais moi destacadas», comentó Prado.

La muestra se articula a través de dos ejes principales. El primero es vital y sentimental, con el mar como tema recurrente y en el que están representadas o recogidas, las obras donde tiene un especial protagonismo: Trazo de Xiz, Ardalén e De Profundis, entre otros. En este apartado, se exhiben varios cuadros con esta temática, material nada fácil de encontrar en exposiciones pasadas del autor coruñés.

El segundo eje es temático y recorre los diferentes perfiles profesionales del artista que, como historietista, repasa la trayectoria por los libros publicados hasta la fecha, con especial dedicación a Ardalén, obra que le mereció el Premio Nacional, y como no, su última y aplaudida obra, Presas fáciles. También se mostrarán algunos carteles y materiales menos conocidos de aficionados.

En otros dos espacios habilitados del Sexto Edificio se podrá ver su obra como paisajista, el espacio Lugares; y como ilustrador de libros, obras ajenas que el dibujante logró iluminar. Cabe destacar el dedicado a su amigo, recientemente fallecido, el escritor Agustín Fernández Paz.

Por último, también hay un espacio dedicado a la animación, convertido en un punto de encuentro para adultos y chavales con el Xabarín como maestro de ceremonias, y películas como Os Vixiantes do Camiño, en exhibición continua; y De Profundis, en varios pases. También se recordará la serie de animación Men in Black, producida por Steven Spielberg.

«Miguelanxo Prado es un artista total que llega al gran público y que tiene una importante proyección internacional, siendo un referente en países como Estados Unidos», señaló Xosé Leal. Una definición acertada para el historietista gallego que ha roto fronteras y fusionado géneros, entre aplausos.

«Que o Museo dea cabida a un autor que no 90 % da súa obra é banda deseñada é un signo do propio espírito da institución», indicó Prado: «Ela é unha das formas artísticas do século XX, e xunto coa animación, merécese a atención e o recoñecemento como disciplina».