El arte de plantear preguntas

María Cedrón ¡CORRE FORREST, CORRE!

CULTURA

25 ago 2016 . Actualizado a las 08:12 h.

Ayer me desperté con un regalo magnífico: El éxtasis del escultor de madera Steiner. No pude esperar y antes del café, saboreé el que fue el primer paso de la prolífica carrera del alemán Werner Herzog en el mundo del documental. Entendí entonces la importancia de un maestro que ha creado su propia escuela en torno a personajes reales, solitarios, que llegan al límite perdiendo el miedo a la muerte. Pero desde que en 1974 dibujó con imágenes el interior de aquel carpintero-saltador llamado Walter Steiner, su trayectoria como documentalista ha ido engordando con trabajos que suelen romper la partitura. No hace mucho The Daily Best le pidió que analizara el polémico vídeo de la canción Famous, del álbum The life of Pablo, de Kenny West. El clip, dirigido por el propio cantante, reúne en una cama a personajes de cera entre los que están George W. Bush, Donald Trump, Taylor Swift, Rihanna... El vídeo resulta inquietante, pero como dijo Herzog, da espacio para crear tu propia historia, plantear preguntas sobre cómo llegaron ahí, qué celebraron... El veredicto: «El cantante entraría en mi escuela».

Puede que ello responda a que West no ha olvidado uno de los objetivos fundamentales de un buen director: Buscar que sus obras hagan que el público se planteé preguntas.