Javier Barreira: «Voy a empujar para que algún día Tadeo Jones se pase por Galicia»

Javier Barreira (Ourense, 1967) fue uno de los artífices del triunfo de Las aventuras de Tadeo Jones. Su siguiente trabajo, Atrapa la bandera, acaba de ganar el Goya a la mejor película animada. Barreiro es coguionista junto a Jordi Gasull y Neil Landau de un filme que ha sido concebido para cautivar a espectadores de cualquier continente. El papel del norteamericano Landau ha sido el de asegurar la universalidad de la historia y sus planteamientos. «En este tipo de proyectos, para que tengan cierta rentabilidad hay que pensar en distribuirlos por todas partes, y no pueden tener unas características muy, muy españolas, porque hay chistes que nos gustan mucho pero luego fuera no los entienden», explica Barreira.

-Pocas cosas tan universales como el espacio, que parece la última gran aventura.

-Sí, no sé por qué, pero el concepto del espacio debe ser como el de un aventurero moderno. Miras a los aventureros y están todos ahí con el cuchillo en la selva y se puede ver como anticuado, pero el de astronauta es como eso mismo en moderno y tiene mucho atractivo para todo el mundo. Incluso ahora que ya no hay carrera espacial a los niños les fascinan los astronautas. Para los de nuestra edad ya ni te cuento.

-Igual inspira vocaciones.

-Totalmente. Cuántas vocaciones se han perdido por el profesor de matemáticas que te las hace odiar, y cuánta gente se ha hecho historiador porque esas clases eran brutales. Con el cine pasa igual. Del día que vi La guerra de las galaxias hasta recuerdo cómo iba vestido, por ejemplo. Ver esa película con 10 años me marcó, también a la hora de mi afición al cine.

-Con «Atrapa la bandera» competían dos producciones gallegas, «Maimiño» y «Noche de ¿paz?». El director de esta última, Juan Galiñanes, dice que la animación en Galicia tenía mucho potencial pero que se dejó morir...

-A mí me da mucha pena. El sector audiovisual es muy complicado y el de la animación muchísimo más todavía. Que alguien consiga hacer una película de animación me parece heroico. La gente no se puede imaginar el trabajo, el sacrificio y el dinero que cuesta. A lo tonto, a lo tonto, son proyectos carísimos. Hasta el más barato es carísimo. Claro que es una pena, pero en un mercado tan pequeño como es el español, si no lo apoyas se acaba muriendo.

-Conseguir rodar es difícil, pero rentabilizar una película lo parece todavía más. En los Goya se volvió a hablar del IVA y de la piratería.

-Es un negocio y es una pelea. El reto es hacer pelis buenas que tengan su sentido y que puedan interesar al público, pero es tan difícil conseguir eso. Y el IVA, claro. Si ya pagar impuestos es una jodienda, tener que pagarlos por algo que es entretenimiento, si tengo que recortar gastos no me lo quito de la leche. Me los quito del cine. Eso también te lo mata.

-¿Cómo va la segunda parte de «Tadeo Jones»?

-En principio se terminará a finales de año, pero se estrenará en el verano del 2017. Aprovecho para decir una cosa que creo que puedo contar. Hemos procurado este año un homenaje a nosotros mismos como país, hacer que Tadeo Jones en esta aventura pase por España. Aunque viaje por ahí y visite mil sitios, hará una paradita por aquí, que creo que se la merecía.

-¿No irá a excavar en el castro de Baroña o Santa Trega?

-Qué más quisiera yo. Yo voy a empujar para que eso se haga algún día y que se deje caer por Galicia. Ojalá, aunque lo veo complicado. Pero por España sí que se dará un paseo.

---

---

---