Se espera una gala calentita, con Manuela Carmena y sin Felipe VI, con una Isabel Coixet enfadada, polémica en la alfombra roja y el escándalo a las subvenciones del cine español como telón de fondo
06 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Los Goya entrarán en la treintena con una gala que, como mínimo, de prometedora tiene un rato. Es posible que, dentro de unos años, alcance cuotas de popularidad tan altas como aquella en la que Tosar le dedicó su premio a «ese señor bajito» que, en lugar de a Irak, podía haber venido a Galicia si lo que quería era petróleo, o puede que, de trivial y soporífera, nadie la recuerde pasado mañana. Cuenta con papeletas para la primera opción. Se presenta peleona. La temática dominante de los trabajos propuestos para hacerse con el cabezón (con alguna que otra excepción) es de todo menos amable -corrupción, preferentes, prostitución y crisis-, tan cruda como la realidad misma. No ayuda al sosiego el escándalo de las subvenciones al cine español. En el patio de butacas, caras nuevas y alguna que otra acusada ausencia. Y puestos a hacer quinielas (las de los ganadores están ya demasiado sobadas), estas serán las polémicas que, previsiblemente, espolearán a los tuiteros esta noche. Que ardan las teclas.
1. #DóndeEstáFelipe
Jamás te perdonaremos, Carmena, que Felipe y Letizia nos hayan dado plantón. El monarca y su esposa, convencidos cinéfilos, han preferido esta vez declinar la invitación y ausentarse de la cita. Lo cierto es que nunca han acudido. Sí lo hizo Felipe VI hace 16 años, el mismo día en el que soplaba sus 32 velas. Tomó asiento junto a la entonces presidenta Aitana Sánchez Gijón y desde el escenario, Almodóvar, fuerte tras recoger su premio por Todo sobre mi madre, se arrancó a cantarle el Cumpleaños feliz. No obstante, el cupo de celebridades estará copado en la gran fiesta del cine español. Pedro Sánchez y Albert Rivera harán un hueco entre conversación y conversación para atender al sector cultural. No faltarán tampoco ni Pablo Iglesias (¿irá de traje?), ni Manuela Carmena, ni Cristina Cifuentes ni, como en otras ocasiones, el ministro en funciones, Íñigo Méndez de Vigo.
2. #DiegoSerranoPresidente
Los de este sábado serán los primeros Goya de Resines como presidente, después de que en junio González Macho, muy oportunamente, pusiese su renuncia sobre la mesa. Será necesaria mucha concentración para que, cuando el intérprete cántabro se aupe al escenario para entonar un discurso históricamente dilatado y con fama de tostón, el espectador sea capaz de desterrar de su cabeza a Diego Serrano contándole que todo ha sido un sueño. Pura carne de meme. ¿Y sobre qué reflexionará? Ya se ha chivado. Y no será nada nuevo (no por recurrente menos importante): la piratería y el IVA cultural.
3. #IsabelCoixet
Se ha ofendido. La directora estupenda se ha cabreado. No le ha sentado nada bien que, en uno de los vídeos promocionales de los Goya 2016, Dani Rovira se mofe del ridículo que hizo al recoger, como un flan, su cabezón por Mi vida sin mí en el 2003. Al parecer nadie le pidió permiso para recurrir a las imágenes de archivo y utilizar su momentazo de gloria. Así que Coixet, ni corta ni perezosa, levantó el teléfono y le cantó las cuarenta al director. «Se metieron conmigo de una manera gratuita y fea. Estaría bien que me pidieran disculpas», declaró a El Periódico. El spot ya ha sido retirado de los canales oficiales. Su lugar lo ha ocupado un nuevo corte en el que Resines se burla del desafortunado rap que se marcó hace dos ediciones.
4. #ElTaquillazo
A día de hoy, Enrique González Macho está imputado por el mayor fraude que se recuerda dentro de la industria del cine español. La cosa va de la siguiente manera: las salas de cine fingieron aforos abarrotados para aparentar que determinadas películas reunían los requisitos establecidos para recibir una subvención (ayudas que van de 30.000 euros a 60.000). Otras, directamente, compinchadas con las distribuidoras, se inventaron proyecciones y falsas sesiones matinales. Manipularon para ello documentación y datos. Las productoras, que eran las que recibían la pasta del Gobierno, les pagaban comisiones a los cines. 228 habrían falseado sus cifras en un escándalo que afecta , al menos, a doce películas. En la gran velada del cine, con seguridad, esta espina dará que hablar.
5. #Saphir
A pesar de que toda la atención de la alfombra roja suelen llevársela los atuendos, las parejas y los escotes, este año la moqueta de los Goya cuenta con un controvertido e incómodo protagonista. Entre los patrocinadores de este escaparate previo a la ceremonia se encuentra, un año más, la marca de perfumes Saphir. Se trata de una firma condenada por plagio, un fabricante de fragancias de bajo coste que (supuestamente) calca aromas de Puig, Carolina Herrera, Paco Rabanne y Nina Ricci, y que desprestigia y desacredita así una antesala consolidada como un espacio dedicado a la imagen, en el que marcas como Chanel, L'Oreal, Estee Lauder o LVMH no se andan con contemplaciones. La gresca está servida.