Los incendios que arrasaron Galicia en el verano del 2006 permitieron ver el círculo lítico libre de vegetación. Vicente Caramés, que ya había realizado la catalogación del yacimiento (círculo y túmulos) en 1992, regresó a Lobeira tras el verano para ver el yacimiento sin vegetación, y vio claramente el círculo lítico. Pidió entonces la opinión al arqueólogo José Suárez, encargado de las últimas campañas en el monte de O Facho de Cangas, quien ratificó la idea.
«La Comunidad de Montes de András fue muy receptiva con el tema y facilitaron la conservación del yacimiento; de hecho, gracias a ellos se ha conservado hasta ahora el yacimiento», recuerda Vicente Caramés, quien añade: «Los comuneros me dijeron entonces que había existido otro círculo similar pero había desaparecido».
Edad del Bronce
El arqueólogo del Museo do Mar opina que se trata de un yacimiento con un gran potencial científico porque «el círculo lítico está situado al lado de túmulos y de abundante material del Bronce». Los túmulos son de la época neolítica, con una cronología aproximada entre mediados del V a inicios del III milenio antes de Cristo.