Asistencia desigual en los colegios de A Coruña a las pruebas de la reválida
CULLEREDO
A algunas escuelas no acudió ningún alumno y en otras no hubo ausencias
13 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Las pruebas de la reválida de sexto de primaria, que finalizan hoy, presentan una acogida desigual en los centros públicos de A Coruña. Las cifras de asistencia varían, y mucho, según los colegios: desde prácticamente la totalidad de los convocados presentes hasta aulas completamente vacías, o casi.
Uno de los centros públicos con menos alumnado fue el Ramón de la Sagra donde, de los 50 estudiantes de sexto curso que estaban convocados a la prueba, solo se presentó uno, según datos de la dirección. Lo mismo ocurrió en otro colegio del barrio de Elviña, el Salgado Torres, con un solo alumno de 33, y en el Isaac Díaz Pardo de Culleredo, 2 estudiantes de 49. Esto significa que la asistencia a la reválida no superó el 4 % en ninguno de los tres.
Más significativo aún es el caso del colegio José Cornide Saavedra, donde el absentismo a las pruebas de la reválida fue total: no se presentó ningún alumno. Y a pesar de que, según la dirección, «moitos pais non asistiron á xuntanza informativa da ANPA». Lo mismo ocurrió en el Castro Baxoi de Miño, a donde no acudió ninguno de los 29 estudiantes susceptibles de hacer la prueba.
Fueron menos de la mitad
Aunque no fue tan significativo, el absentismo en la reválida también se hizo notar en varios colegios donde la cifra de alumnos que se presentaron apenas alcanzó el 50 %. A los centros públicos María Pita y Montel Touzet acudió alrededor de la mitad del alumnado de sexto, mientras que en Rosalía de Castro y Eusebio da Guarda lo hizo cerca del 43 %. Mientras que en varios colegios de la provincia, como el Tarrío de Culleredo y el Luis Seoane de Oleiros, más del 60 % de los convocados no se presentaron.
Acudieron la mayoría
A pesar de las protestas contra la reválida protagonizadas recientemente por las ANPA y la Plataforma Galega en Defensa do Ensino Público, algunos centros contaron durante las jornadas de pruebas con la totalidad, o prácticamente, del alumnado.
Así ocurrió en el colegio Labaca, donde se presentaron todos. La dirección del centro, no obstante, afirma que este «é un caso especial» y aclara que los padres, en general, creen que la prueba «non vale para nada porque o profesorado xa ten datos suficientes para saber como están os nenos». Fue tras recibir la carta de la Consellería de Educación, donde se explicaba que el examen no repercutiría en el expediente académico, cuando los padres consideraron que «non perdían nada con facela», añade.
Un caso similar es el del colegio Juan Fernández Latorre, al que acudieron a hacer las pruebas 45 estudiantes de 50, el 90 %. En un punto medio se encuentra el San Francisco Javier, donde la asistencia a la reválida fue del 66 ?%, 33 alumnos de 50. La jornada transcurrió con normalidad en todos los centros, incluidos los concertados, con una inasistencia residual.
El absentismo aumentó el segundo día de pruebas en varios centros
La cifra de absentismo en las pruebas de la reválida en A Coruña aumentó con respecto al primer día. Según confirmaron algunos colegios a La Voz, varios alumnos que se presentaron a las pruebas del pasado miércoles no fueron al colegio durante la jornada de ayer.
En el Eusebio da Guarda, por ejemplo, acudieron ayer a clase 31 alumnos, cuando el miércoles lo habían hecho 35. Lo mismo ocurrió en el centro María Pita, que pasó de 29 alumnos el primer día a 27 el segundo. «Nunha das clases viñeron bastantes pero, na outra, moi poucos», señaló la dirección, que especifica que «un dos estudantes que acudiu tivo que marchar porque se atopaba mal». La inasistencia también se elevó, aunque menos, en el Rosalía de Castro, donde asistieron 10 niños, uno menos que el día anterior.
El absentismo no aumentó, sin embargo, en algunos centros donde la asistencia fue muy reducida. Es el caso del Ramón de la Sagra y el Salgado Torres, donde tanto el primer día como el segundo acudió a hacer las pruebas un único alumno en cada uno.
Problemas de conciliación
«Mi hija llegó a casa el miércoles quejándose de que la mayoría de sus compañeros no habían ido a clase», explica Estrella Martínez, quien decidió no llevar ayer a la niña al colegio. Aunque se opone a las pruebas, explica que el primer día tuvo que mandarla al centro porque «trabajaba por la mañana y no tenía con quién dejarla».
Victoria Hermida, otra madre a quien le ocurrió algo similar con su hijo, tuvo que llevarlo al colegio igual a pesar de estar «rotundamente en contra» de la reválida. Opina que si los padres tienen «derecho a no llevarlos al centro» también tienen «que poder tener dónde dejarlos para que no vayan ese día» a clase.