La vida persiguiendo borrascas

caterina devesa A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

El gallego Pablo Montero recorre el mundo en busca de «la ola perfecta»

04 jul 2018 . Actualizado a las 14:06 h.

Pablo Montero tiene 29 años, vive en A Coruña y es farmacéutico, pero ninguna de esas tres características son las que lo empujan a recorrer el mundo, sino que es su pasión por el surf la que lo lleva a «cometer locuras y viajar para encontrar la ola perfecta».

Con ese objetivo, Pablo estudia el parte de olas mundial para localizar en qué país se producirá el fenómeno. Ha estado ya en el Ártico, Australia, Israel, Panamá o Indonesia. Ahora suma un nuevo destino a su colección. «El jueves vi que había varias borrascas en América del Sur y que iban a llegar al sur de África a principios de semana. Entonces no me lo pensé y me fui». En su viaje hasta «el paraíso» tuvo que coger un vuelo hasta Madrid el viernes por la mañana, hacer escala en Doha y desde ahí a Namibia. Una vez en África se juntó con otros surfistas que también se habían desplazado con el mismo objetivo. «Juntos alquilamos un 4x4 y condujimos cinco horas por el desierto hasta un pueblo. Esa noche dormimos allí y cuando salió el sol seguimos dos horas más hasta Skeleton Bay», explica el joven.

Sin tabla con la que surfear

Entre la emoción de alcanzar su sueño a Pablo le surgió un inconveniente. «Llegué a Namibia, pero mis tablas no. Menos mal que otro surfista me dejó la suya. Estábamos todos a una y había muy buen rollo», comenta. Por fin en la playa, disfrutó de una experiencia «alucinante. Una ola larga con 5 tubos en la que estuve 2 o 3 minutos». Para que se hagan una idea, las de aquí duran «unos 30 segundos», según explica Pablo, que añade «ni un ordenador conseguiría fabricar una ola tan perfecta como la de allí».

Tras el subidón de vivir unos días en los que coincidió con algunos de los mejores surfistas del mundo, Pablo ha vuelto a la realidad. Uno podría pensar que después de alcanzar el Santo Grial jugar en casa podría ser un bajón, sin embargo para este buscador de olas la vuelta ha sido buena. «Hoy [por ayer] he ido a Baldaio. No tiene nada que ver, pero Galicia es una maravilla». Aún así, Pablo lo tiene claro: «Intentaré volver en la próxima borrasca».