De los 140 caracteres de Twitter al cara a cara solidario en un bar
A CORUÑA CIUDAD
Los tuiteros coruñeses volvieron a juntarse en la segunda edición de la #QuedadaCoruña logrando otra vez un éxito de asistencia
26 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El año pasado fue el primer intento de la #QuedadaCoruña. Y gustó tanto, que no quedó más remedio que repetirlo. Los tuiteros coruñeses volvieron a reunirse para desvirtualizarse y pasar de la interacción en móviles y tablets a verse en persona. La cita era a las 20.30 horas en la plaza de María Pita. Estaba a oscuras. Se celebraba la Hora del Planeta. Así que muchos tuvieron que usar las linternas sus móviles para reconocerse, tomar su pegatina identificativa y romper el hielo.
No tenía mucho sentido permanecer allí. Por lo que a la primera indicación de pasar a la siguiente etapa se sumó todo el mundo. ¿El destino? El bar El Feudo, en la calle Panaderas. Además de acoger el encuentro, se comprometía a donar 20 céntimos de cada consumición servida a la Cocina Económica. «Volvimos aquí porque el año pasado nos trataron muy bien y, además, el dueño hizo una aportación muy buena al fin benéfico», explicaba Iván, responsable de la cuenta @A_Coruna.
Es una de las cuentas de Twitter coruñesas con pedigrí. Pero no la única. Otras como @silcerino, @aeropuerto_lcg o @luislo1968 (The Dark Night) también impulsaron este encuentro con dos fines. «Esto va de amistad y solidaridad, si nos vemos y ayudamos a la Cocina Económica me doy por satisfecho», resumía Iván.
Había muchos debutantes. Olalla Pita (@olalla_pita) forma parte de una plataforma de emprendedores llamada Talentum Youth. «Me encanta el networking y esta es una oportunidad magnífica de conocer a gente de todo pelaje e intercambiar opiniones». Hablaba en un corro con Bea (@elbeca47), una celadora que se estrenaba en la #QuedadaCoruña junto a Francisco (@Panrrocco13 y @Frioen lospies), que emplea la red social para promocionar su libro.
Son apenas unos ejemplos de todas estas interacciones que ayer fueron de carne y hueso. Con el techo del Feudo lleno de pajaritos de Twitter y cerca de 200 kilos de comida recogidos nada más empezar, todo discurrió entre hashtags, retuiteos y me gusta. Por su puesto y como no podía ser menos fue trending topic.