El absentismo escolar en el colegio Ramón de la Sagra supera ya el 80 %

Javier Becerra
Javier becerra A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

PACO RODRÍGUEZ

Hay padres que mandan a sus hijos al centro porque no tienen «otra opción»

24 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Lejos de relajarse la tensión con el final de la retirada de la uralita de la parte de las aulas, el conflicto entre los padres del colegio Ramón de la Sagra y la Xunta continúa. Ayer volvió a producirse un absentismo masivo en las clases, faltando entre un 80 % y un 90 % de los alumnos. Así lo aseguraba Ángeles Franqueira, portavoz de los padres. El porcentaje, según ella, podría ser más alto. «Hay padres que llevan a sus hijos porque no tienen otra opción. Ni medios para pagar una guardería, ni familiares a los que acudir», explica.

Entre las noventa familias afectadas por la obra de la retirada de la cubierta existen todo tipo de casos. Algunos con serios problemas de conciliación. Franqueira pone un ejemplo: «En infantil, hay unos padres que no tienen familia en A Coruña a la que recurrir. Se han tenido que buscar una guardería privada estos días y pagar, además, un servicio de comedor. Todo ello, abonando el propio comedor del colegio para no perder la plaza, cuando ya esté todo bien y el niño pueda volver a clase».

El expuesto, según Franqueira, es solo un caso de los muchos que existen en el colegio. En ese sentido y previendo que la situación se prolongue en el tiempo, la semana pasada mantuvieron un encuentro con la concejala de Servizo Sociales, Silvia Cameán, para ver de qué modo el Ayuntamiento podría asumir el cuidado de los niños. Todavía no se ha materializado esa ayuda: «Nos dijeron que nos van a facilitar su apoyo. Se hizo un recuento de las familias afectadas y sus necesidades. Porque hay que tener en cuenta que no todos son iguales. Que unos monitores estén en los centros cívicos con los niños es más o menos fácil, pero aquí hay casos de padres que usaban el servicio de madrugadores o, por ejemplo, los que dejaban los niños allí a comer. Eso es más complicado».

Otro de los aspectos que estaba en el aire era la responsabilidad de los padres respecto a su postura de no mandar a los hijos al colegio. «Hemos hablado con el fiscal provincial y nos ha dicho que no hay ningún problema, que la falta de clase está justificada. ¿Cómo vas a mandar a tu hijo a clase si piensas que puede haber un problema para su salud?», se pregunta Franqueira.

Otro análisis de amianto

La condición que los padres del Ramón de la Sagra ponen para volver a mandar a sus hijos a clase es tener en sus manos el informe que acredite que no existe ningún riesgo para la salud de sus hijos. Este documento resultaría de las mediciones que determinen la cantidad de fibra de amianto que hay en el ambiente.

Desde la Xunta indican que esas mediciones se han efectuado antes, durante y al finalizar la obra, siguiendo la normativa. Sin embargo, el resultado de las pruebas aún no se ha revelado a los padres. Estos indican que dichos análisis normalmente tardan unos 15 días, aunque existe una vía de urgencia que haría que ese resultado se obtuviese entre dos y tres días. Hasta el momento no tienen los resultados de esas mediciones.

«Hemos pedido a la Consellería de Educación poder hacer esas mediciones en el colegio y los análisis urgentes correspondientes a través de una empresa privada asumiendo nosotros los costes para solucionar este asunto lo más rápido posible y volver a la normalidad en el colegio», explica Ángeles Franqueira. Indica que así se lo hicieron saber al jefe territorial de Educación, Indalecio Cabana. «Nos dijo que lo remitía a Santiago y, por ahora, no hemos obtenido ninguna respuesta», asegura.