La ciudad tuvo el mejor verano de los últimos 35 años, con solo 10 días de lluvia
30 dic 2016 . Actualizado a las 08:06 h.Solo en los tres primeros meses del año, A Coruña fue como siempre. Lloviendo casi a diario como si acabara el mundo. Ahí quedaron las terribles inundaciones del 29 de marzo en Sada, cuando aquel día se registraron nada menos que 120 litros por metro cuadrado. Pero tras la tempestad, llegó la calma. Una calma que no se recuerda desde hace 35 años, pues se vivió un verano como el de los andaluces. En julio no cayó ni una gota. Ni siquiera se vieron nubes. En agosto, siendo también muy seco, algo de lluvia hubo (7 litros en todo el mes). Luego llegó un otoño muy cálido, con temperaturas medias que rondaron los 14 grados y con máximas que anduvieron por los 22.
Más sorprendente está siendo este mes de diciembre. ¿Alguien recuerda un día de Navidad como el de este año? Si hasta hubo gente en bañador en la playa. En lo que va de mes, solo se registraron 24 litros. Tan curioso como la temperatura media, que alcanzó los 20,5 grados.
El año comenzó con un diluvio. En los cuatro primeros meses llovió casi tanto como en todo el 2015, que fue el año más seco de la última década, pues solo se registraron 131 días con precipitaciones. En este ejercicio que ahora acaba la cifra se eleva a 156. En todo el 2016 se registraron 1.064 litros cúbicos.
En cuanto a fechas relevantes climatológicamente hablando, aparte del 29 de marzo en Sada, con una tromba que anegó el municipio, está el día más caluroso del año, que fue el 16 de julio, cuando los termómetros de MeteoGalicia mostraron 28,8 grados. Mientras, la jornada más fría se produjo el 16 de enero, con 3,7 grados. Ese mes fue el más lluvioso con mucha diferencia. No se recuerda que en solo 30 días se registrasen 236 litros, cuando en junio no hubo ni medio y en agosto 7,4.
Los días más lluviosos del año fueron el 7 de enero, con 45 litros; el 29 de marzo, cuando en la ciudad cayeron 41,8, y el 10 de febrero, con 31,9.
¿Dónde llueve más?
Cuando preguntamos cuál es el punto más lluvioso del país, la mayor parte pensará que es Galicia, entre otras cosas porque esta comunidad es la puerta de entrada de las borrascas atlánticas que entran en la Península barriendo de oeste a este. Pero no. Por increíble que parezca, Galicia no es el lugar que más cantidad de lluvia recoge anualmente en sus pluviómetros. Le supera Cádiz, en concreto, la Sierra de Grazalema. Su orientación es favorable a la lluvia porque encauza el viento húmedo de Poniente, favoreciendo las condiciones perfectas para que precipite. Y lo hace durante todo el año tanto que, de media, caen más de 2.100 mm de agua anuales.
Y sí, el segundo puesto le corresponde a Galicia que, a nivel general, es la región más lluviosa de Europa. Más incluso que áreas de Reino Unido o la Bretaña o la Normandía francesas o los fiordos noruegos. La sierra pontevedresa de O Candán es el punto más lluvioso de la comunidad gallega. A Coruña está lejos de la cima, donde se sitúan Santiago y Vigo como las ciudades gallegas más lluviosas.
La culpa de un principio de 2016 muy lluvioso y un estío seco fue de «El Niño»
La culpa de todo la tuvo El Niño, un fenómeno meteorológico y oceánico que se produce en el Pacífico y que este año provocó en A Coruña «precipitaciones muy fuertes en los meses propiamente lluviosos y días secos y cálidos en verano».
«Estamos viviendo una situación similar a la de 1997: los primeros meses de ese año fueron muy lluviosos y luego llegaron meses extremadamente secos». Fuentes de MeteoGalicia explican que hace casi 20 años la comunidad gallega vivió una situación meteorológica similar a la que se produjo este año; eso sí, ni entonces se registraron tan pocos días de precipitaciones como los de julio de este año.
Cíclico
El Niño es uno de los fenómenos meteorológicos más importantes del planeta y suele producirse cíclicamente, aunque de manera irregular, en períodos de tres a siete años. Se origina cuando los vientos alisios se debilitan, las aguas cálidas llegan a las costas del norte de Chile, Perú y el sur de Ecuador, y la corriente oceánica fría de Humboldt se aleja de la costa y se hunde hasta 200 metros.
Este acontecimiento climático produce un aumento de la temperatura media a escala mundial. Aunque su mayor impacto se produce en los países americanos de la costa pacífica en el sudeste asiático y en Australia, afecta indirectamente a otras zonas, entre las que se encuentra el noroeste de la Península.
Por A Coruña, como por el resto de Galicia, aparece cada cierto tiempo y eso provoca veranos como el vivido en el 2016.