Un anfitrión en mi recuerdo

José L. Rey Barreiro

A CORUÑA CIUDAD

Falleció Fernando Ares Bermúdez, de la cristalería El Reflejo

26 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Se podría hablar de muchos aspectos familiares de la vida de Fernando Ares, como esposo, como padre, abuelo, etc?, siempre pendiente de sus miembros.

Se podría hablar de su vida profesional, de la labor empresarial que ha realizado, ya desde joven cuando se hace cargo de la dirección de la fábrica de espejos El Reflejo que había sido fundada por sus padres, Jesús Ares y María Bermúdez, oriundos de A Coruña; empresa que se ha transformado hasta convertirse con el paso de los años en un referente puntero y especializado en su gremio y que ya se encuentra en manos de la tercera y cuarta generación familiar.

Quiero en estos tristes momentos centrar mi recuerdo en la amistad, un eje fundamental en la vida de Fernando, donde el trato personal destacaba y descubrías que era una persona excepcional e irrepetible, un hombre independiente, cariñoso y siempre dispuesto a ayudarte ante cualquier problema.

Después de más de treinta años de compartir todo tipo de momentos, yo solo puedo definirlo como un verdadero anfitrión; tal y como lo define la Real Academia de la Lengua, aquella persona que tiene invitados a su mesa o a su casa. Para Fernando su familia, sus amigos y su empresa, eran los motores de su vida, y transmitía esos valores a todas las personas que lo rodeaban.

Se nos va un gran anfitrión que ha sido un ejemplo y modelo de generosidad, su casa de Sigrás siempre estaba abierta a los amigos que eran acogidos con gran cariño por toda la familia.