Expertos del Chuac reclaman un cribado de osteoporosis para evitar las fracturas

La Voz A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

PACO RODRÍGUEZ

Aconsejan practicar densitometrías a las mujeres a partir de los 65 años y a los varones mayores de 70

20 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Coincidiendo con la conmemoración del Día Mundial de la Osteoporosis, los especialistas advierten de la necesidad de intentar poner freno a la enfermedad y, con ello, a sus consecuencias: las fracturas, en especial las de cadera, unas cuatrocientas al año solo en el entorno coruñés.

Jenaro Graña, reumatólogo del Complexo Hospitalario Universitario A Coruña, recuerda que el área sanitaria cuenta con fortalezas valorables, como disponer de un densitómetro «que no tiene lista de espera», en el centro de especialidades del Ventorrillo y un protocolo de indicaciones terapéuticas. Sin embargo, a juicio del especialista es necesario avanzar hacia «un plan integral de atención multidisciplinar» para todos los facultativos que, de una u otra manera, estén vinculados con la atención a esta enfermedad: reumatólogos, traumatólogos, ginecólogos y, sobre todo, médicos de atención primaria, donde recae en primera instancia la gran bolsa diagnóstica. «Es necesario estimular el trabajo conjunto y, sobre todo, hacer énfasis en los centros de salud, entendiendo la carga laboral que ya tienen», indica el especialista.

Contar con este plan permitiría avanzar, en opinión de Graña, hacia una atención que focalizase la importancia de tener osteoporosis, evitando, sobre todo, segundas fracturas, ya que se estima que una de cada tres mujeres y uno de cada cinco hombres mayores de 50 años sufrirá alguna derivada de esa pérdida de masa ósea que, en definitiva, debilita el esqueleto y lo hace proclive a romperse.

No es raro, ejemplifica Graña, que un paciente sea tratado de una fractura vertebral o de radio distal y, sin embargo, al alta no se tenga en cuenta la indicación terapéutica adecuada para la osteoporosis que reduciría la probabilidad de que el mismo paciente vuelva a sufrir otra fractura, en esta segunda ocasión seguramente de mayor gravedad.

Por el momento, A Coruña no cuenta con unidades de prevención de segundas fracturas, pese a que los estudios revelan que evitar una sola cadera rota entre cien posibles cubre, económicamente hablando, el coste de prevención de todo el grupo.

Es por ello que los especialistas opinan que en ese plan debería tenerse especialmente en cuenta, la vertiente preventiva, para lo que proponen como objetivo asistencial desde atención primaria llevar a cabo una especie de cribado o screening, «realizando una densitometría al menos una vez a todas las mujeres mayores de 65 años y a todos los hombres de más de 70». La prueba, junto con un cuestionario de riesgo ya disponible en línea para los médicos de los centros de salud, permitiría «detectar pacientes con riesgo alto de fractura, y en consecuencia, aplicar las recomendaciones terapéuticas», recalca.