Entidades benéficas ya están pagando dinero para evitar más desahucios
A CORUÑA CIUDAD
Cáritas destinó en agosto 12.700 euros para alquileres y Padre Rubinos inició hace un año el servicio de ayuda a arrendados
18 oct 2016 . Actualizado a las 13:09 h.Los desahucios continúan siendo un grave desequilibrio social en la ciudad de A Coruña, donde se ejecuta al menos uno al día. Aunque los bancos aprietan con menos intensidad en las ejecuciones hipotecarias, las instituciones benéficas ven cómo un grueso de sus recaudaciones se han de destinar al sector inmobiliario, básicamente para afrontar pagos hipotecarios y evitar que las familias se vean en la calle. E incluso son más numerosos los casos de alquiler, muchos de los cuales corren a cargo de entidades como Cáritas o Padre Rubinos.
En este último, el servicio es reciente. «No podemos palpar una evolución sobre la casuística de los desahucios porque apenas llevamos un año con ayudas para este fin -explica Jorge Sampedro-, pero es evidente que si hemos iniciado este servicio es porque la gente lo necesitaba». Y en los últimos doce meses han atendido casos «muy frecuentes» para frenar las graves consecuencias del impago de suministros de luz, agua o gas, y plazos de alquiler o hipoteca. «Con el paso de los meses notamos una mayor demanda para afrontar este tipo de pagos», añade Sampedro.
En Cáritas no están estipuladas las ayudas por plazos hipotecarios, pero sí para alquileres. Y son muchos los casos que atienden. El pasado mes de agosto, solo la Cáritas Interparroquial de A Coruña destinó casi 13.000 euros para familias que debían afrontar de forma urgente el alquiler para evitar acabar en la calle. «Y esa cifra no incluye las ayudas aportadas desde las más de treinta parroquias de la ciudad también para sufragar alquileres», matizan desde Cáritas. «Y seguimos teniendo pisos de acogida con familias en condiciones muy graves, aunque en su mayoría se trata de inmigrantes».
Stop Desahucios
Desde las plataformas que defienden a los ciudadanos denunciados por los bancos aseguran que la presión, si bien no es igual de intensa, continúa sobre el eslabón más débil. Además de miembro de Stop Desahucios en A Coruña, Antonio Vázquez es un abogado que ha defendido numerosas causas de este tipo. «Los bancos se están refrenando un poco antes de enviar a la gente a la calle de forma judicializada, pero los casos no desaparecen», explica. Como cada tercer miércoles de mes, Stop Desahucios celebrará mañana por la tarde una reunión con los afectados.