Trabajadores de Artesanos impiden el inicio de las actividades municipales

Rodri García / F. Molezún A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

CéSAR QUIAN

El Ayuntamiento se comprometió a pagar en dos semanas y el centro abrió de nuevo

27 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

«No se puede entrar; esos son los trabajadores que llevan siete meses sin cobrar porque el Ayuntamiento no le pagó a la sociedad». Esto explicaba una mujer en la entrada del Circo de Artesanos a las diez de la mañana de ayer. Ella era una de las personas inscritas en el taller de memoria que, organizado por el Ayuntamiento, tenía que empezar a esa hora en dichas instalaciones. También la profesora que imparte dicho taller se encontró, al llegar, con la puerta cerrada. En la misma estaban dos de los cuatro empleados del centro. «Uno está de baja y el otro en el turno de tarde», explicaba uno de ellos. El otro argumentaba: «Si dejas de pagar el alquiler dos o tres meses ya te desahucian; yo tengo que pagar, tengo que sacar adelante a mi familia...». Interrupción para explicar a otra persona que no se podía pasar. Y vuelta a los argumentos: «Podemos decir que el Ayuntamiento está aquí de okupa porque hacen cosas en las instalaciones pero no pagan por ello». En la misma línea señalaban que ellos también hacían las labores de limpieza y conserjería y que si los responsables municipales «hicieran esto en otro sitio tendrían que pagarlo».

«Faltaba firmar el convenio»

Mientras tanto, la junta directiva y un grupo de socios se encontraban en el interior de la sociedad analizando qué decisión iban a tomar después de comprobar en el banco que no habían recibido los 95.000 euros.

Después de una serie de llamadas, la funcionaria que estaba en las dependencias de Artesanos explicó a los inscritos en la taller de memoria que la clase se recuperaría y a una de las inscritas en las clases de inglés que empezarían a media mañana, tal y como estaba previsto.

Y es que tras una serie de llamadas, el presidente del Circo de Artesanos, Alfredo Rodríguez, explicó: «En el Ayuntamiento hablamos con Carmen Loriga y se comprometió a que dentro de dos semanas van a pagar todo». La conversación sirvió para aclarar la situación: «Faltaba, según ella, la firma del convenio, pero eso a nosotros nos lo dicen ahora. Eso estuvo ahí demorado... Ahora mismo vamos a firmarlo».

Alrededor de las diez y media de la mañana, la junta directiva y los socios acordaron abrir las puertas y permitir la celebración de las actividades programadas: «Vamos a dejarlos pasar, porque la gente tampoco tiene la culpa de las cosas que hace el Ayuntamiento». Después de reflexionar «no había necesidad de esto», Alfredo Rodríguez apostaba por darle un voto de confianza a los gestores municipales: «Hay que darle un poco de confianza; nosotros hacemos esto por los empleados, que están sin cobrar y están desesperados». A continuación el presidente y el secretario cogieron el bus y se fueron a Servicios Sociales a firmar el convenio municipal.

Igual que con otras sociedades

Apenas una hora más tarde, el alcalde, Xulio Ferreiro, se pronunciaba en el palacio de María Pita sobre este problema: «No Circo de Artesáns se está tramitando, ou se tramitou, o convenio exactamente igual que este tipo de convenios que ten o Concello coas entidades da cidade e ningunha outra está tendo estes problemas». Ferreiro recordó que estas dificultades económicas con la sociedad ubicada en la calle San Andrés ya se habían producido el año pasado y argumentó: «O Circo de Artesáns ten outros problemas de xestión que non teñen que ver co Concello da Coruña». En este sentido añadió que el Ayuntamiento «ten un convenio que é bastante xeneroso, 90.000 euros para unha entidade a cambio de facer un uso limitado das súas instalacións por parte dos veciños e das veciñas». Según Ferreiro, se trata de «un esforzo para que o Circo de Artesáns siga despois de tantos anos. Eu creo que hai que poñer algo do outro lado tamén, de ver como vai viabilidade a corto e medio prazo». Y concluyó el alcalde: «O Concello da Coruña ten que ingresar ese diñeiro durante este ano 2016 e aínda non rematou. Pois esas cousas hai que telas en conta».

El convenio inicial para acoger el centro cívico garantizaba 15 años de viabilidad para la sociedad

El 19 de marzo del año pasado el entonces alcalde, Carlos Negreira, y el presidente del Circo de Artesanos, Alfredo Rodríguez, firmaban un acuerdo por el cual la sociedad pasaba a acoger en sus dependencias un centro cívico de 350 metros cuadrados. Esto suponía multiplicar por cuatro el espacio que hasta entonces utilizaba el Ayuntamiento y reforzaba el futuro de la entidad para los 15 años de duración del convenio.

El acuerdo incluía habilitar una entrada por la calle Orzán para los usuarios del centró cívico, con lo cual los socios de Artesanos no se verían afectados por el funcionamiento del centro cívico. De hecho esa entrada existe, aunque está cerrada con una persiana. Sin embargo, este convenio fue modificado por el nuevo equipo municipal de gobierno que le dio al mismo una vigencia anual y abona a Artesanos alrededor de 90.000 euros por el alquiler de las instalaciones.

El Ayuntamiento dispone así de un centro cívico en Pescadería del que carecía hasta ahora. En el mismo tendrán lugar desde hoy el grueso de las actividades ofertadas en las semanas pasadas y en las que se han estado inscribiendo un buen número de vecinos de la zona.

Al próximo pleno

El Partido Popular, que había promovido el acuerdo inicial, pedía ayer al alcalde que pagara la deuda pendiente con Artesanos ya que, en caso contrario, «la entidad estaría abocada al cierre». Los populares recuerdan las reuniones con los responsables de Artesanos en los últimos meses y anuncian que llevarán el asunto al próximo pleno municipal.