La Marina ampliará las zonas de juegos y tendrá dos quioscos móviles con cafetería

Eduardo Eiroa Millares
E. Eiroa A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

Paco Rodríguez

El Ayuntamiento invertirá medio millón en aumentar las áreas de sombra y redefinirá las paradas de los autobuses

23 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Seis meses después de su cierre al tráfico, y tras pasar su primer verano como zona peatonal, la Marina recibirá su primera actuación para mejorar ese espacio. El gobierno local no esperará al presupuesto del 2017 para actuar allí y ya invitó a cuatro empresas a redactar otros tantos proyectos de mejora, entre los cuales escogerá uno que será el que se lleve a cabo. En el diseño invertirá 18.000 euros y otros 420.000 euros más en la ejecución de los trabajos, que tendrán que tener unas características determinadas.

Áreas infantiles

Más espacio. El gobierno local, considera que las actuales zonas de juegos son pequeñas, por lo que las ampliarán con elementos acordes con el entorno. También se mejorarán elementos de seguridad, previsiblemente con algún sistema de cierre que separe esa zona del mar.

Sombra

Árboles y otros elementos. Entre las «deficiencias» detectadas por Rexeneración Urbana en la zona está la falta de sombra. Ya desde un primer momento, al inicio del mandato, se avanzó el interés en crear más espacios protegidos del sol. Ahora se harán, primándose que esa sombra proceda de elementos vegetales, aunque no tiene por que ser este el único elemento. Se valorará la distribución de las sombras y que protejan también las zonas de juegos.

Ajardinamiento

Más verde. El proyecto incluye un estudio de la vegetación con un «tratamento brando», integrando el arbolado en el conjunto y escogiendo las especies más apropiadas para ese entorno. Se mejorará también el ajardinamiento en la Marina, integrando en el conjunto los recorridos peatonales y en bicicleta.

Movilidad

Cambios en el bus. El proyecto incluirá también un «estudo de localización» de las paradas de bus en relación con los pasos de bicicletas y recorridos peatonales. Aunque están por definir esas paradas, el plan podría incluir un traslado de la parada de Puerta Real a una zona próxima, eliminando cientos de buses al día que hoy pasan por allí.

Hostelería

Nueva oferta. El plan incluye también una propuesta hostelera y de servicios en la zona. Inicialmente se iban a hacer dos cafeterías, pero el gobierno local decidió eliminar esas construcciones. Ahora propone algo distinto y pide a los proyectistas «proposta de localización e definición a nivel de anteproxecto de dúas instalacións móbiles para uso de quiosco-cafetería».

Diseño

Relación con el mar. En cuanto al estilo que se pide, se solicita que el diseño potencie «a relación da cidade na súa entrega natural co mar», dando a la Marina «a consideración de alta calidade do espazo urbano» y entendiendo ese espacio peatonal como «a sala de estar da cidade».

Plazos

Antes del próximo verano. El gobierno local decidió no esperar a tener presupuestos para el 2017 para iniciar los trabajos. Por eso los hará con cargo a los actuales. Los autores del diseño que resulte ganador tendrán diez días de plazo, después de la adjudicación, para exponer en un foro público las líneas maestras de la intervención que proponen, recogiendo también allí las sugerencias que puedan aportar los ciudadanos. El próximo verano la Marina deberá estar reformada, aunque es previsible que la obra se pueda acabar antes de ese horizonte.

Ámbito

El Parrote, como está. El ámbito de actuación propuesto es únicamente el frente de la Marina. Es decir, el Parrote quedaría sin cambios. Ese espacio, el del Parrote, quedó mejor rematado en su día. En la Marina, de hecho, todavía faltan actuaciones como la instalación de la señalización definitiva y la sustitución del tramo de asfalto en su parte inicial por las losas que fueron retiradas en su día para evitar su rotura por el tránsito constante de vehículos.

En el aire el futuro de los desarrollos hosteleros previstos en el Parrote

Los establecimientos hosteleros previstos en el Parrote, por ahora, siguen en el aire y sin que se aclara quién y cuándo se va a instalar en ellos. El proyecto del Silabario quedó finalmente congelado por los precios de la concesión y por la ya alta oferta de restauración existente en la zona. Tampoco se sabe qué será de los que se ubican bajo las arcadas y que llevan cerrados dos años, desde que en el 2014 la zona se abrió a los peatones. Por ahora, esos espacios permanecen vacíos y si no surgen empresas interesadas a corto plazo es probable que el próximo verano sigan cerrados, porque en todos ellos hacen falta obras para poder poner en marcha un local. Los hosteleros del entorno, por su parte, se opusieron siempre a más concesiones por considerar que la oferta es suficiente.