A Coruña suma seis meses sin servicio de tren de contenedores

Eduardo Eiroa Millares
E. Eiroa A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

Marcos míguez

Renfe acabó con la línea regular de San Diego aduciendo falta de demanda

19 sep 2016 . Actualizado a las 07:37 h.

Las empresas de A Coruña tienen menos medios para ser competitivas que, por ejemplo, las de Vigo. En la ciudad no existe un servicio de transporte de contenedores por ferrocarril. Lo hubo durante décadas, hasta que Renfe decidió suprimirlo. Se cumplen esta semana seis meses desde que salió de la terminal de San Diego el último tren.

La operadora adujo falta de demanda para dar ese pasó y aseguró que si había clientes, volvería la línea. Lejos de hacerlo, desde entonces la empresa pública se dedicó a vaciar la terminal del material necesario para el transporte, dejando la estación sin medios y la línea en un estado cercano al abandono, llena de hierbas y con la grúa pórtico necesaria para cargar y descargar los contenedores estropeándose sin ningún mantenimiento.

La falta de demanda argumentada por la compañía contrasta con lo que hasta ahora ocurría en San Diego. La línea sí tenía clientes, aunque pocos, porque las constantes mermas y encarecimiento del servicio hicieron que muchos buscaran otras alternativas, hasta el punto de que hoy resulta más rentable mover mercancías desde Barcelona hasta A Coruña por carretera que hacerlo en tren.

Hace cinco años la compañía ferroviaria transportaba 1.500 contenedores por ejercicio en la denominada línea multicliente, un tren regular que cualquier empresa podía emplear pagando la tarifa correspondiente. Ese ferrocarril tenía al principio una frecuencia diaria, que Renfe redujo primero a tres, para acabar limitándola hace dos años a una sola, que se logró recuperar tras unos meses sin ella.

En la misma proporción en que se reducían las frecuencias, se iban perdiendo clientes, porque además de ser un transporte caro, no permitía a las empresas decidir fechas de transporte con la misma agilidad que por carretera. Solo había tren cuando lo había. Y desde hace medio año, ya no hay ninguno.

Un rodeo por Vigo que penalizaba el precio final frente al transporte por carretera

Los problemas de la línea de contenedores comenzaron con la reducción de frecuencias. Con todo, el paso de cinco a tres todavía resultaba operativo. La situación empeoró de modo considerable tras la primera supresión, hace algo más de dos años, y el restablecimiento de la línea por un nuevo recorrido.

Hasta ese momento los trenes procedentes de Barcelona lo hacían llegando a la ciudad de modo directo a través de Monforte. Sin embargo, Renfe varió ese recorrido y estableció que esos mismos convoyes hicieran otro camino, pasando primero por Vigo para subir después hasta A Coruña. El aumento de kilómetros lo pagaba el cliente, no la operadora, lo que suponía un alza en el precio por contenedor de unos 150 euros. En un contexto en que los combustibles han mantenido un precio bajo, el tren dejó de ser una opción económica. Por carretera resultaba más barato, y más útil porque, con una única frecuencia semanal, las empresas carecían de flexibilidad para encargar sus suministros.

Finalmente, Renfe eliminó la línea, con lo que la terminal de San Diego, en el centro de A Coruña, al lado de la Palloza, está todavía más infrautilizada. La nave de 8.000 metros cuadrados allí ubicada está vacía y deteriorándose y se han alquilado oficinas a una entidad cultural.

La estación depende hoy íntegramente de tres tráficos que la hacen rentable. Pero fuera de esos tres clientes -carbón, madera y bioetanol- no hay otros movimientos. El día que fallen, la estación de San Diego se quedará vacía.