El bus urbano roza los 21 millones de viajeros y cada vez son más fieles

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

Marcos Míguez

Continúa el aumento de viajes con tarjeta mientras caen los pagos en metálico

01 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El transporte público de A Coruña rozó el año pasado los 20 millones de pasajeros. Es la cifra más alta del último trienio y supone casi 1,4 millones más que en el 2014, cuando 19,62 millones de personas cogieron el autobús.

Los vehículos rojos de la Compañía de Tranvías no solo contaron con más clientes, también le son más fieles. Durante los últimos tres años se ha desplomado el número de viajes abonados con dinero en metálico, pasando de 5,82 millones en el 2013 a 3,92 durante el pasado ejercicio. Al mismo tiempo han aumentado los trayectos pagados con tarjeta, que pasaron de 18,9 millones en el 2013 a los 19,8 en el 2015.

Ese incremento se ha producido tanto en los viajes pagados con la Millennium, cuyo precio está financiado en un 35 % por el Ayuntamiento y que pasan de 14,9 a 15,7 millones entre el 2013 y el 2015; como en los trayectos abonados a través del bonobús social, en los que María Pita asume el 75 % del precio y que aumentaron de 3,99 a 4,13 millones en el mismo período de tiempo.

Los datos de viajeros y su progresiva fidelización coinciden con las conclusiones que ofreció una encuesta de satisfacción encargada por la compañía al Instituto Sondaxe. Según esa muestra, los usuarios otorgaban al servicio una nota de 7,17 puntos sobre 10, y el 89 % de ellos decían estar contentos con su funcionamiento frente al 61 % del 2006.

Los usuarios valoraban además especialmente la puntualidad de los vehículos, su limpieza, el buen trato del personal y la ubicación de las paradas.

Pero además de esos datos, el sondeo también mostraba que el 51 % de los viajeros recurren al bus aunque podrían ir en coche, y citaban entre los principales motivos de esa decisión la escasez de plazas de aparcamiento, el bajo coste del transporte público o el ahorro de tiempo.

Aunque las cifras de usuarios y de la encuesta indican que el autobús tiene cada vez más presencia, el servicio deberá afrontar diversos interrogantes durante los próximos años. Por una parte está la pretensión del actual gobierno local de cambiar el mapa de rutas y las tarifas, además de volver a introducir el carril bus.

Esas medidas están anunciadas desde primer día del actual mandato, y los responsables municipales han insistido en que su intención es favorecer el uso del transporte público, pero por el momento no se ha concretado cómo se llevarán a cabo ni en qué plazo de tiempo se desarrollarán.

Tampoco está decidido cómo se conjuntará la futura estación intermodal con el servicio actual y, en un plazo más corto, este mismo año, cómo se complementará el funcionamiento de las líneas urbanas con la entrada de los autobuses metropolitanos hasta el centro de la ciudad, ya que la propuesta de la Xunta para hacerlo ha despertado dudas tanto de la compañía como del Ayuntamiento, los taxistas o la asociación de amas de casa.