El aumento de las intolerancias a alimentos y el interés por la nutrición sana tiran de la demanda
21 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.La moda de los productos ecológicos echa raíces en A Coruña. El número de tiendas ha crecido en los últimos años, pero también la cifra de personas interesadas en este tipo de alimentos. «A Coruña es una de las ciudades con más establecimientos ecológicos de Galicia», comenta Isabel López, dueña de Horta+Sá, uno de los rincones de referencia dentro del sector en A Coruña.
Hoy en día, «hay mucha gente con intolerancias que necesita incluir estos alimentos en su dieta», pero hay otros que entran en el local porque «quieren alimentarse bien, mejorar su salud», puntualiza López. Aunque Horta+Sá es un local pequeño, Isabel presume orgullosa de la creciente demanda de los clientes, que piden, sobre todo, «productos de mi propia huerta». Entre ellos, la mujer destaca «las lechugas, las acelgas y los tomates» como los artículos estrella.
El mejor negocio bio de España
Pero Horta+Sá no es el único que puede alardear de su gran abanico ecológico. En la avenida de Finisterre está la Aldea Biomarket, proclamada la mejor tienda bio de España en el año 2016.
Con tan solo un lustro de vida, la Aldea se ha posicionado como uno de los locales de mayor importancia, y cada día crece la cartera de clientes del negocio: «Siempre aparecen consumidores nuevos. Al principio compran una o dos cosas, pero luego vuelven a por más», explica la dueña de la Aldea, Rita Peña.
Allí, la oferta de artículos podría compararse a la de un supermercado convencional. De hecho, la única diferencia es que en la Aldea Biomarket, «todo está hecho con ingredientes naturales», señala Peña. Pero además de punto de venta, la Aldea ofrece también un servicio de restaurante y organiza talleres de cocina. Uno de los últimos fue «sobre alimentación vegana», dice Peña.
El postre, también al natural
Justo detrás del Cantón Pequeño, en la calle Santa Catalina, se encuentra la única heladería ecológica de la ciudad, The Bio Factory. Uno de sus propietarios, Broder Fernández-Obanza, describe el establecimiento como «una especie de laboratorio». Muchos clientes no se limitan únicamente a probar las variedades, sino que también aconsejan sobre cómo se podrían mejorar: «De alguna manera nos echan una mano. Nos dicen cómo enriquecer un sabor en concreto, si habría que echarle más de un ingrediente o menos», dice.
Eso sí, la heladería reta a diario a los consumidores, normalmente poco acostumbrados a probar sabores diferentes y exóticos. Entre ellos, Fernández-Obanza destaca «el helado de requeixo con manzanas asadas, pero también el de vainilla y maracuyá» como los más llamativos. Con todo, los clásicos nunca faltan y, entre la oferta, «el de chocolate» sigue siendo el más vendido.
Otra característica que los diferencia con respecto a la competencia es, precisamente, su carta, que hace distinción entre los helados veganos -sin ningún ingrediente de origen animal- y los elaborados a partir de lácteos.
Desde la heladería muestran una visión muy optimista para el sector de lo ecológico en su totalidad. De hecho, para el propietario del establecimiento, Galicia juega con ventaja «y año tras año va progresando en lo que a crecimiento de producción ecológica se refiere», concluye.
Dieta con beneficios
Lo ecológico hace ya tiempo que dejó de ser una moda para convertirse en casi una necesidad. Cada día aumenta más el número de casos de alergias e intolerancias, algo que obliga a muchas personas a replantearse su dieta y a recurrir a la opinión de un experto.
Otros, sin embargo, tan solo buscan cambiar y mejorar su estilo de vida, como en el caso de Marta Porto, que lleva aproximadamente diez años enganchada a lo ecológico. Para ella, todo empezó a raíz de su interés por la alimentación, algo que la llevó a realizar numerosos cursos de nutrición. Pero Porto reconoce que el punto de inflexión se produjo cuando probó este tipo de artículos: «Reconocí su calidad y su confianza desde el principio», dice. Además de usuaria, Marta Porto es también empleada en la tienda Horta+Sá y explica que «muchos clientes vienen aquí porque el médico les dice que tienen déficit de algún nutriente». Si consumen estos productos y mantienen una dieta equilibrada, «su salud mejorará», concluye esta consumidora.