A Coruña es la única ciudad gallega en la que aumentó el paro este año
A CORUÑA CIUDAD
Los datos de la EPA revelan que hay 1.600 desempleados más que en junio del 2015
30 jul 2016 . Actualizado a las 14:11 h.La ciudad de A Coruña sigue nadando a contracorriente. Si el resto de Galicia y España han conseguido reducir el número de vecinos que engrosan el registro del paro, la urbe herculina no solo no ha disminuido la cifra de desempleados, sino que la ha aumentado en 500 personas más con respecto a la encuesta de población activa (EPA) publicada el pasado marzo, alcanzando ya los 19.000 coruñeses. La brecha es todavía mayor si se comparan estos datos con los recogidos en junio del 2015, cuando había 1.600 personas que estaban trabajando y que en la actualidad ya no disponen de un empleo.
Por lo que se refiere al sexo, el número de desempleados al final del segundo trimestre de este ejercicio sigue mostrando una balanza más preocupante en el sector masculino, con 11.000 hombres en paro frente a 8.000 mujeres; unas cifras que -aunque crecen- continúa la misma tónica de marzo, con 10.800 varones por 7.700 féminas. El dato positivo es que han crecido también el porcentaje de vecinos que están en activo (118.500 frente a los 117.100 de marzo), y también se ha registrado una mayor ocupación, 900 personas más que en el primer trimestre del año (99.500 frente a 98.600).
Equivalencia
Aunque los datos de la EPA y del Ministerio de Empleo no siempre van en la misma línea, sí hay que destacar que en este caso hay cierta coincidencia. De hecho, en los últimos datos publicados por el Gobierno central a principios de julio se hablaba de que en A Coruña había registrados un total de 19.012 desempleados, y aunque esta cifra suponía una rebaja de 703 personas menos con respecto al mes anterior, la ciudad volvía a convertirse en la única de Galicia donde se reduce menos el paro.
De hecho, según la última encuesta de población activa, A Coruña, Vigo y Pontevedra han aumentado el número de vecinos desempleados en el último trimestre, pero solo la urbe herculina sigue en datos negativos si se compara estos registros con los de junio del año pasado.
Reacciones municipales
Los distintos grupos políticos no han tardado en reaccionar y el PP ha sido el primero en pedir a Ferreiro «que se centre de una vez en solucionar los problemas de los coruñeses ante los desastrosos datos de la EPA». El socialista José Manuel Dapena recordó que aumenta el paro «en unos meses en los que se suele crear empleo vinculado al período estival por el turismo. El retraso en la concesión de licencias y la ralentización en la administración son causas», unos argumentos que también comparten desde el bando nacionalista.
Los sindicatos reclaman la puesta en marcha de un plan de industrialización
Desde los distintos sindicatos hay una única explicación a este descalabro en el aumento de desempleados en la ciudad: la falta de un plan de industrialización para toda la comarca. Xosé Carrillo, secretario comarcal de UGT, apuntó que el error ha estado en no «haber cambiado o sistema produtivo da comarca e apostar por unha política comarcal de emprego. A Coruña ten un espazo mínimo para a instalación de empresas, pero se houbese un plan de industrialización comarcal podería actuar como polo de atracción». Asimismo, criticó que las políticas laborales a nivel central y autonómico no han facilitado la creación trabajo, y que desde la Administración local tampoco ha ayudado mucho el retraso en la concesión de licencias, en la aprobación de presupuestos o la paralización de grandes proyectos.
Xabier Filgueira, secretario comarcal de la CIG, también abogó por poner en marcha un plan de industrialización que implique a la ciudad y a toda su comarca, y quitó responsabilidad al Ayuntamiento, aduciendo que tiene poco margen de maniobra a nivel laboral. Sin embargo, reconoció que «alguén terá que involucrar a todas as administracións, aos empresarios, a Cámara de Comercio e demais para promover o emprego e a industrialización».
En esos mismos términos se expresó Demetrio Vázquez, secretario general del Comisiones Obreras, que reconoció que «non hai unha planificación clara do futuro desenrolo da industrialización na comarca, e nestes momentos están en perigo moitas industrias importantes, e o futuro está na industria».