Jerome volvía a Madagascar con un corazón sano

Á. M. Castiñeira

A CORUÑA CIUDAD

Jerome (centro), con sus hermanos de acogida
Jerome (centro), con sus hermanos de acogida . César Quian< / span>

El pequeño fue operado en el Materno en abril del 2006 gracias a la oenegé Tierra de Hombres

08 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Jerome había llegado a A Coruña el día de San Valentín. Delgado y triste, a sus 12 años solo anhelaba una cosa: «Quiero jugar al fútbol con mis amigos». Los médicos de su país, Madagascar, le habían recomendado alejarse del deporte, ya que padecía una cardiopatía congénita.

Pero solo dos meses después su gesto era otro. Y su corazón, gracias al buen hacer de la oenegé Tierra de Hombres y al trabajo del equipo de corazón infantil del Materno, estaba sano. Había cogido peso. Siete kilos que le daban fuerzas para jugar a la pelota sin parar.

Unas horas antes de partir hacia su tierra, el pequeño malgache se fotografiaba con los que habían sido durante cuatro semanas sus hermanos coruñeses, Teresa, Juan, Santi e Ignacio. Amalia, la madre de acogida, tenía sentimientos encontrados: «Nos da mucha pena que se tenga que marchar».