Obras de mejora en tres galerías de la Marina, una de ellas Casa Rey
03 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.«Condensa en su arquitectura la esencia de la ciudad de cristal. La cornisa rizada, la cerámica vidriada de inspiración mudéjar y los balcones de la fundación Wonenburger la convierten en una auténtica casa de muñecas». Esto leía ayer alguno de los visitantes que entraba en la plaza de María Pita por Puerta Real. Es la placa de Casa Rey, el inmueble que hace esquina en dicha entrada. Estos días dicha placa se puede leer, aunque el edificio está cubierto de andamios, ya que está siendo pintado de nuevo. Es una de las tres fachadas de las galerías coruñesas que está siendo repintada. Todo apunta, según podía verse ayer mismo, que la Casa Rey recuperará el color amarillento que ya lució, no sin cierta polémica, en el mes de mayo de 2001. De todos modos, se mantiene el respeto por el tradicional color blanco de las galerías coruñesas en este edificio que proyectó en 1911 Julio Galán, que durante una década sería arquitecto municipal de A Coruña. El pintado del inmueble completa las mejoras que ya se habían llevado a cabo en varias galerías de la Avenida de Montoto, la última de ellas la colindante Casa Batanero hace un par de años.
Las otras dos galerías que también están siendo repintadas se encuentran al inicio de la avenida de la Marina, en los números dos y cuatro; curiosamente ambas fueron proyectadas por Faustino Domínguez en los años 1882 y 1881, respectivamente. La fachada de la galería del número cuatro está prácticamente acaba de pintar en el exterior, de hecho ayer solo tenía andamios en la parte baja de la misma. Una curiosidad de esta fachada es que los cristales que tiene actualmente son de mayor tamaño que los proyectados en el proyecto inicial. La otra galería que está en obras, también fundamentalmente de reparación y pintura, es la de mayor altura del conjunto. Con todo ello, al concluir estas obras la principal postal de la ciudad habrá pasado de nuevo la ITV.
La renovación de la fachada acristalada se suma al profundo cambio de la zona
Las galerías de la Marina (casi nunca se alude a la Avenida de Montoto donde también están parte de las mismas) son el telón de fondo de una zona emblemática de la ciudad, la primera con la que se encuentran los más de 120.000 turistas que cada año llegan al puerto a bordo de los trasatlánticos. Si siempre se han ido produciendo cambios en esta fachada marítima, en estos momentos se está dando uno de los más profundos desde hace décadas. A esta renovación no son ajenos los dueños de las galerías que desde hace tiempo se han sumado a la misma y en estos momentos prácticamente todos los inmuebles han sido rehabilitados. Y cuando los desperfectos han sido muy notorios en alguno de los edificios, desde el Ayuntamiento se han encargado de recordarle a sus propietarios la necesidad de conservar unas construcciones consideradas como el símbolo de la ciudad.
A la renovación del telón de fondo de la Marina, se ha unido en los últimos meses la de los hosteleros de la zona, un gremio que ha visto como las reformas llevadas a cabo pueden ser beneficiosas para sus negocios. De hecho, todos los locales han sido ocupados, mientras que la estética de los mismos se ha uniformado, con alguna pequeña excepción. Además, estos cambios han supuesto dejar al descubierto los arcos de los edificios, una forma de darle valor a estas construcciones en su conjunto, y no solo a las galerías.