«La crisis ha demostrado que las constructoras son empresas fuertes»

DIEGO VÁZQUEZ Presidente de Apecco

Apenas lleva dos semanas en el puesto de presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de la Construcción (Apecco), pero Diego Vázquez es un veterano del sector, ya que pertenece a la cuarta generación de constructores en su familia. Toma las riendas de la asociación, dice, en «un momento esperanzador», mientras estudia cómo repartir el tiempo entre Apecco, su empresa Construcciones Vázquez y Reino y la presidencia del club de baloncesto Xiria de Carballo.

-Es el primer cambio de presidente en Apecco desde hace bastante tiempo...

-El anterior presidente, Antón Arias, quería un cambio después de 15 años en el cargo. El comité de dirección pensó que podría encargarme yo de ese relevo, muy complicado, porque estos quince años han sido muy fructíferos, manteniendo a la asociación viva en un escenario complicadísimo. Porque si algún sector ha padecido la crisis ese fue sin duda la construcción. A pesar de todo, Apecco goza de un prestigio y una situación económica muy buena.

-¿Por qué aceptó? 

-Tengo muchos vínculos con Apecco, ya que mi abuelo, Ramón Vázquez, fue fundador hace treinta años de la asociación, y fue mi mentor en el terreno profesional.

-¿Cuál es el papel de la asociación de cara a las empresas que la componen?

-Este es un sector que no siempre ha estado unido, y ahí las asociaciones cobran una importancia fundamental. Sobre todo en el diálogo con las instituciones, que son nuestro cliente principal. Tenemos que mediar para que las reglas del juego sean iguales para todos. La prueba de que Apecco tiene razón de ser es que está muy viva y que agrupa a la mayoría de las empresas más importantes del sector.

-Aquellas que han sobrevivido. 

-Esta crisis lo que ha dejado de manifiesto es que las empresas de la construcción son muy duras y fuertes y que han capeado de la mejor de las maneras este temporal. Y lo han hecho de dos maneras, dando más calidad a las obras en la ejecución y en la prevención de riesgos, donde hemos mejorado muchísimo, y minimizando los costes para mantener el empleo. Esto nos ha mantenido y nos prepara para que haya más inversión al salir de la recesión. Creo que veremos un escenario nuevo en el que podremos volver a términos de crecimiento.

-¿Deriva su optimismo de que en el 2014 se duplicase en A Coruña la inversión en obra pública? 

-Lo que esperamos es que esto sea el inicio de una recuperación. De nada vale que se hagan inversiones puntuales si no tienen continuidad. Que no sea algo coyuntural marcado por la proximidad de unas elecciones. No hablamos de llegar a los niveles de inversiones faraónicas de antes de la crisis, pero sí que abogamos por realizar obras necesarias y consensuadas y, sobre todo, mantener lo que hay. Con el mantenimiento de las infraestructuras existentes se garantizaría el empleo y la carga de trabajo en la mayoría de las empresas. Si se mantiene el ratio de estos primeros seis meses del año el sector podría relanzarse. Y ahí A Coruña y su área de influencia tienen un papel fundamental como economía más importante de Galicia. Donde hay una economía fuerte, siempre se necesitan infraestructuras, y viceversa, unas buenas infraestructuras sirven de base al desarrollo.

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