«Siempre fui de derechas, es algo que me va en los genes»

Eduardo Eiroa Millares
E. Eiroa A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

PACO RODRÍGUEZ

El número 7 de la candidatura del PP repite por tercera vez en las listas populares 

15 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Es de esas personas que en el cara a cara se ganan a la gente. De verbo fácil y experto en salpimentar su conversación a base de ironías. Miguel Lorenzo Torres (Pontevedra, 1961), repite por tercera vez en las lista populares después de los últimos cuatro años al frente de la Concejalía de Servicios Sociales.

-¿Cómo se llega de Pontevedra a A Coruña?

-De casualidad. Mis padres tuvieron un accidente de coche aquí y me llamaron cuando estaba en Madrid. Vine y, en una cena con un ellos y un abogado, este me dijo que me viniera a trabajar aquí. Me encantó A Coruña y ya no me moví, fue la mejor decisión de mi vida.

-¿Dónde estudió?

-En Pontevedra de niño. Con un profesor que me gustaría citar, Germán de la Iglesia Faustino. Fue un referente toda mi vida. La carrera en Santiago, donde fui compañero de clase en Derecho de Alberto Núñez Feijoo y Carlos Negreira.

-¿Qué tal eran como estudiantes el presidente de la Xunta y el alcalde?

-Pues los dos eran muy buenos estudiantes, Feijoo muy de colegio mayor. Yo más bien organizaba los pasos de ecuador y los fines de carrera... Fuimos de la promoción del 84 y nos llevamos todos muy bien, nos seguimos reuniendo de vez en cuando.

-¿De dónde le viene lo de la política?

-Estuve diez años en Padre Rubinos de voluntario y otros diez en el Colegio de Abogados (su profesión). Me pareció que tenía una deuda con la ciudad y la política era una forma de saldarla. Hace ocho años Carlos Negreira me habló de su proyecto y me ilusionó, reconozco que me lo pensé poco, pero no me arrepiento.

-Estuvo en la oposición, después en el gobierno local, y ahora repite en la candidatura.

-La primera vez podía alegar inconsciencia -dice con humor- pero ahora ya pasé por todo y sé a lo que voy y lo que hago.

-¿Por qué el PP y no otro partido político?

-Siempre fui una persona de derechas, me va en los genes. ¡Soy creyente, religioso y practicante y monárquico convencido! En la izquierda pintaba poco. Fui criado en la burguesía, hijo de dos maestros, tuve una vida privilegiada, lo reconozco, pero también soy una persona muy comprometida socialmente y muy respetuosa con quienes piensan distinto que yo.

-Si siguen en el gobierno, ¿repetirá en Servicios Sociales o preferiría, por ejemplo, Cultura?

-El gobierno lo formará Carlos Negreira y asumiré las responsabilidades que él quiera que asuma.

-¿Hay más gente pobre hoy que hace cuatro años en la ciudad?

-Servicios Sociales cada día tiene más usuarios porque cada vez hay más programas. Los hay que identifican la concejalía con los más necesitados, pero cosas como la ayuda a domicilio o el talón restaurante son para todos, o los centros cívicos, que hemos potenciado con más actividades.

-Pero la crisis también llegó a A Coruña con más paro y más personas sin recursos que antes de su estallido.

-Pues claro que se notó la crisis, pero aquí hay un gran tejido social al que hemos apoyado y eso ha ayudado a que A Coruña sea una especie de balsa de aceite en esta crisis. Cuando oigo a Mar Barcón diciendo que quiere volver al modelo de antes me pregunto a cuál, porque había menos presupuesto, menos actividades y dedicaban los fondos de la concejalía a obras suntuarias como el Ágora, que iba a costar 7 millones y costó 19.

-La conservera Celta sigue ahí con sus infraviviendas.

-He hecho una política para que esas personas puedan irse, también programas de formación y laborales, pero no podemos imponerles que salgan de allí, tenemos que convencer. No es como Penamoa, que era suelo municipal, es privado.

-Si no dan las cuentas, ¿habrá pactos?

-Soy más concejal que político. Hay quién está más preparado que yo para pensar sobre esos temas.