Franco y el nuevo tren a Santiago

Xosé Alfeirán

A CORUÑA CIUDAD

La estación de trenes de San Cristóbal se empezó a construir en 1939.
La estación de trenes de San Cristóbal se empezó a construir en 1939. alberto martí villardefrancos< / span>

La puesta en marcha del enlace ferroviario entre A Coruña y la capital gallega el 14 de abril de 1943 sirvió para exaltar los triunfos del dictador

26 abr 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

A Franco le gustaban los actos cargados de simbolismo, sobre todo aquellos que realzaban su triunfo, su caudillaje y su papel de salvador de la patria frente a la por él, y sus partidarios, calificada de nefasta Segunda República.

El 14 de abril de 1943. Ese día Galicia resurgía: eso decía la propaganda oficial y la prensa sometida a los designios de la dictadura. Ese día Franco inauguraba la línea férrea A Coruña-Santiago. Lo había prometido el 22 de junio de 1939 cuando, tras recibir el título de alcalde honorario y la medalla de oro de la ciudad herculina, colocó el primer raíl en la estación de tren llamada hoy de San Cristóbal, y ahora lo cumplía.

Ese día, a las cinco y cinco de la tarde, bombas de palenque anunciaban su llegada a Santiago. Poco después entraba, con repique de campanas y bajo palio, en la catedral, realizando una visita privada; era año santo compostelano y rezó ante el apóstol Santiago, restablecido por él como patrón de España en el año 1937. Hacia las cinco y veinte llegaba a la estación de ferrocarril santiaguesa. En la amplia explanada le esperaban numerosas autoridades y estaban desplegadas diferentes fuerzas militares y de la Falange; en el centro, en un alto mástil, ondeaba una gran bandera española franquista.

Con uniforme de capitán general fue recibido con los acordes de la marcha real y aclamado por la multitud con vítores de «¡Franco, Franco, Franco!». Tras las ceremonias religiosas de bendición, oficiadas por el arzobispo de Santiago, subió al convoy ferroviario. A las seis menos cuarto, entre vivas al salvador de España y la marcha real, partía el primer tren inaugural para A Coruña. Llegaría a las ocho menos cuarto, siendo aclamado de nuevo por la multitud que acudió a recibirle a la estación coruñesa. Pero, ¿por qué Franco eligió ese día y esas horas para poner en marcha este enlace ferroviario?

Antecedentes

El 14 de abril de 1931. Ese día en A Coruña, a las cuatro y media de la tarde, los concejales republicanos, ganadores por amplia mayoría en las elecciones municipales, partían, desde la sede del Casino Republicano, situado en el Cantón Grande, hacia la plaza de María Pita. Al son de la Marsellesa y acompañados de un creciente gentío llegaron al palacio municipal. A las cinco tomaron pacíficamente el Ayuntamiento y proclamaron la República, colgando del balcón principal la bandera española republicana y la gallega.

A esa hora en Madrid acontecía lo mismo, mientras las calles rebosaban de gentes aclamando la República. Hacia las siete y media dela tarde, en la Puerta del Sol, los miembros del nuevo Gobierno provisional republicano tomaron posesión del Ministerio de Gobernación. Nacía un nuevo régimen.

Construcción

Iniciada en 1927 por la dictadura de Primo de Rivera, la construcción de la línea férrea Zamora-Ourense-Santiago-A Coruña quedó paralizada en 1932 por el Gobierno republicano; pocos meses después se reanudaron los trabajos que se interrumpirían en 1936. Ahora en 1943 el que había derrotado a la II República volvía a vencerla: él si había terminado el tren a Santiago, aunque la línea completa no se remataría hasta 1957. Por eso ese día y esa hora.