El 82 % del nuevo claustro de la UDC respalda al rector

Ana Lorenzo Fernández
Ana Lorenzo A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

La sesión de investidura también sirvió para elegir al valedor universitario

26 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La Universidade da Coruña (UDC) ya tiene nuevo claustro, aunque en esta ocasión no se lograron cubrir todas las plazas disponibles y de las 303 vacantes se ocuparon únicamente 275, situación que ya se produjo hace cuatro años, aunque en aquella ocasión no había tantas bajas. Entre los cometidos con los que ayer se estrenó el nuevo órgano de gobierno estaba el de elegir al nuevo valedor universitario, cargo que volvió a recaer en el profesor Enrique Martínez Ansemil, que logró 156 votos a favor de los 189 posibles. El otro punto de la orden del día fue la aprobación de la memoria de gestión de la UDC del año pasado, que fue presentada por el propio rector, quien destacó que los recortes económicos marcaron ese ejercicio «de relativa normalidade académica», y en el que pasaron por las aulas de la UDC 21.500 estudiantes. La puesta en marcha de nuevas titulaciones dobles, másteres internacionales o la International Summer School fueron otros datos importantes del 2014, en el que se produjo un aumento del 18 % en la producción científica. Sin embargo, el impacto negativo de los recortes provocó la pérdida de recursos «e unha permanente sensación de asfixia económica», a lo que se unieron las dificultades para ampliar la plantilla de trabajadores, que solo permitieron contratar a 2 profesores doctores.

Tras las palabras de Armesto, le tocó el turno a varios claustrales, y así Anxo Calvo, decano de Economía e Empresa, pidió «un plan de financiamento menos lesivo cos intereses da nosa universidade»; mientras que, el catedrático de Informática Luis Castedo mostró su preocupación por la consolidación de universidades públicas de dos velocidades, y criticó «el modelo reduccionista y limitado que nos impide evolucionar». Alejandro Pazos fue más crítico y dijo que la UDC «está totalmente trasnochada, desnortada y en proceso de degradación». Pese a sus palabras, la memoria del rector recibió el 82 % de los votos favorables, un 4 % más que el año pasado.