La jueza envía a prisión a dos de los detenidos por el secuestro de indigentes

Alberto Mahía A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

Policía Nacional

Los arrestados reconocieron ante la policía que trabajaban para ellos, pero no contra su voluntad

06 mar 2015 . Actualizado a las 22:47 h.

La jueza ha decretado prisión provisional sin fianza para dos de los detenidos por el supuesto secuestro de indigentes en Culleredo. A los arrestados se le imputa trata de seres humanos, contra la integridad moral, amenazas graves, detención ilegal, robo con violencia o intimidación y a uno de elos tenencia ilícita de armas. 

Cuatro miembros de una misma familia fueron detenidos este jueves, si bien uno de ellos ya fue puesto en libertad tras declarar en el cuartel.  Según el Tribunal Superio de Xustiza de Galicia, los dos detenidos que no declaraoron este viernes ante la jueza no están pendientes de pasar a disposición judicial, por lo que se deduce que el otro también ha quedado en libertad en sede policial.

Por el momento, en las declaraciones realizadas en la policía, todos ellos se declararon inocentes. Reconocieron, eso sí, que los tenían trabajando para ellos. Pero nunca contra su voluntad. Dijeron que jamás pusieron la mano encima a alguno y hasta presumieron de brindarles un trato «humano y bueno». la policía los señala por delitos de detención ilegal, trata de seres humanos con fines de explotación laboral, lesiones, amenazas con armas, robo con intimidación, estafa continuada y otros contra la integridad moral.

Durante años, esta familia de feriantes de Culleredo esclavizó a un buen número de indigentes. Los buscaban en la calle. Solo se fijaban en personas sin arraigo familiar, sin nada ni nadie en la vida. Los engatusaban con un trabajo, una cama y tres comidas al día. Ya bajo sus órdenes, comenzaba una brutal explotación. Amenazados de muerte y golpeados, durante el día los obligaban a jornadas laborales de sol a sol y sin descanso, y ya por la noche los metían a dormir bajo llave en caravanas o chamizos. A algunos les tramitaban las pensiones y luego se ponían como cotitulares en sus cuentas para poder ir al banco y poder cobrarlas. Eso es lo que ha descubierto la Policía Nacional, que de enero a estas fechas supo de la existencia de hasta siete «esclavos» en ese núcleo de Rumbo, en la parroquia cullerdense de Celas.