Gallegos crean un «software» para clasificar el tipo de ojo seco

Ana Lorenzo Fernández
ANA LORENZO A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

La cuarta tipología es la marmórea cerrada.
La cuarta tipología es la marmórea cerrada.

Hasta ahora los optometristas escogen la opción de forma subjetiva

11 feb 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Ninguna lágrima es igual que otra, ya que al menos hay cuatro tipos distintos en función de la cantidad de grasa de la película lacrimal, algo que afecta directamente a la sequedad del ojo y a todas las patologías que se puedan asociar a ella. Hasta ahora, los optometristas realizaban de forma subjetiva esta diferenciación para clasificar las diferentes lágrimas, pero desde la Universidade da Coruña están trabajando para conseguir un software que analice y diferencie automáticamente cada gota de agua que emana de un ojo.

El grupo de Visión Artificial y Reconocimiento de Patrones (Varpa) de la Facultade de Informática de la Universidade da Coruña (UDC) colabora en un proyecto del equipo de Investigación en Optometría, dirigido por la catedrática de la Facultade de Óptica e Optometría de Santiago Eva Yedra-Pimentel, y está analizando cientos de imágenes de la superficie ocular (película lagrimal) con el objetivo de «encontrar un sistema objetivo para distinguir los distintos tipos de lágrimas que existen», explicó el profesor Manuel González Penedo, director del grupo de investigación coruñés.

Utilización de lentillas

Los resultados de este estudio son muy importantes, ya que la clasificación de las lágrimas viene determinada por la grasa que puede haber en la superficie ocular de cada persona, «y esto incide directamente en la sequedad del ojo». Además de todas las dolencias y molestias que pueden tener como origen el ojo seco, los descubrimientos de este trabajo también son muy importantes para la utilización de lentes de contacto, ya que en función del tipo de lágrima habrá que utilizar lentes de diferente material (distinta hidratación, ionización...).

En estos momentos, ya se han realizado las clasificaciones globales -sobre toda la imagen-, y el siguiente paso será determinar las locales, ya que una persona es capaz de tener en la lágrima regiones con patrones diferentes. Además, el grupo investigador ya está preparando toda la patente correspondiente de este software, ya que este proyecto -de más de tres años de trabajo- está enmarcado en un programa que contempla la solicitud de patentes.