Su empresa recuperó parte de la fachada original de la galería multicolor de A Coruña
23 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El segundo apellido de Manuel Rodríguez Cerqueiro ha quedado como una impronta en Carral, donde desde comienzos del milenio se alza una de sus empresas más importantes. Este empresario de primera generación recibió ayer sepultura en Pastoriza (Arteixo), no muy lejos de donde se levantó su primera sede, junto al embalse de Meicende. Cerqueiro es una de las referencias autonómicas en el mundo de la carpintería. Ebanista de origen, Manuel Rodríguez construyó poco a poco una empresa que hoy da trabajo a más de cien empleados en su centro del polígono de Os Capelos de Carral, donde fue una de las primeras en instalarse. Sus grandes responsabilidades no le impidieron alejarse de los trabajos manuales, su verdadera vocación, mezclado siempre entre la plantilla. «No parecía el jefe», sentencia el alcalde de Carral, José Luis Fernández Mouriño. «Era un trabajador incansable», apostilla el exalcalde de Arteixo, Manuel Pose Miñones, con quien tuvo una relación muy fluida.
Sin duda, uno de los trabajos que engrandeció el sello Cerqueiro se encuentra en la postal más coruñesa. Esta empresa recuperó la galería multicolor de la famosa fachada herculina de la Marina, una minuciosa reconstrucción de madera y cristal que databa del siglo XIX, y de cuyo resultado Manuel Rodríguez se sentía especialmente orgulloso.