Un acusado de manejar billetes falsos dice que se los «colaron» en una feria

alberto mahía A CORUÑA / LA VOZ

CAMBRE

La Fiscalía pide para el hombre tres años de prisión y el cierre de su locutorio

08 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El hombre de origen africano, dueño de un locutorio que funcionaba en la ronda de Outeiro, ocupó ayer junto a un amigo el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial porque la policía los detuvo en el verano del 2012 por estafar, supuestamente, a un hombre con billetes falsos. Cuando registraron el negocio, los agentes hallaron más moneda ilegal. Por eso fueron juzgados y por eso el fiscal pide que sean condenados a una pena de 3 años de prisión, así como el cierre del establecimiento por un período de 4 años.

El principal acusado juró que los billetes se los «habían colado» en una feria de Santa Comba, que jamás estafó a nadie y, por tanto, es del todo inocente.

No lo cree así la acusación, que sostiene que los procesados contactaron con un hombre en un bar de la zona de la plaza de las Conchiñas. «Con intención de lograr un lucro indebido, le hicieron creer que tenía en su país de origen una gran fortuna pero que no la podía sacar en su totalidad ni podía tener en España dinero a su nombre, razón por la que para disfrutar de dicho dinero era necesario que otras personas le entregaran billetes a cambio de otros de mayor valor que él poseía. Con tal ardid consiguió que le entregaran 60 euros a cambio de 2 billetes de 50 que le dio el principal acusado en el locutorio que regentaba. Además, le dijo que si quería comprar más billetes «se pasase por dicho negocio», afirma la acusación.

Los dos billetes de 50 euros resultaron ser falsos, hecho del que se percató la víctima al llegar a su domicilio, por lo que presentó denuncia ante la Guardia Civil de Cambre el 31 julio del 2012. Ayer, en el juicio, la víctima de la estafa no reconoció a ninguno de los acusados.

A raíz de la denuncia se inició una investigación por parte de la Guardia Civil en la que se constató que los imputados «utilizaban dicho establecimiento para distribuir a cambio de dinero billetes de 50 euros falsos que previamente habían adquirido de personas que no han podido ser identificadas en este procedimiento».

Así, el 2 de agosto del 2012, agentes de la Guardia Civil se personaron en el locutorio. Procedieron a su detención y les encontraron tres billetes de 50 y cuatro de 20 euros falsos. También tenían 2.645 euros de curso legal y moneda extranjera.