Denuncian el enterramiento ilegal de los residuos del secadero de Betanzos

La Voz BETANZOS / LA VOZ

BETANZOS

CÉsar Delgado

Arcodega señala que fueron llevados al polígono del Espíritu Santo sin gestión previa y avanza acciones legales

07 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El secadero de lúpulo de Betanzos no ha logrado sacudirse la polémica ni después de derribado. Desde que se produjeran las primeras caídas de cascotes en el interior del inmueble a finales del 2014, este mítico edificio no ha dejado de causar trastornos, empezando por el corte de un carril en la avenida de Castilla durante muchos meses, o por la acumulación de residuos sin retirar una vez ejecutada la destrucción del edificio (incluso aparecieron pintadas ironizando sobre el tema).

Ahora el secadero ha dado una vuelta de tuerca más pese a haberse esfumado. La Asociación de Recicladores de Residuos de Construcción y Demolición de Galicia (Arcodega) avanzó sendas denuncias ante la Consellería de Medio Ambiente y el Seprona por la negligente gestión de los residuos del secadero. «Hemos comprobado cómo los han enterrado detrás de una nave abandonada en el polígono del Espíritu Santo, muy próxima a la sede de la ITV, sin ningún tipo de tratamiento de materiales y reciclaje», explica el portavoz de Arcodega, quien suma así una de las múltiples denuncias por lo que considera una «negligente práctica habitual con los residuos en nuestra comunidad».

«Hemos hecho un seguimiento durante los últimos días y hemos comprobado cómo se ha enterrado el material detrás de una vieja nave de cerámica, y todo ese material gráfico lo pondremos a disposición de las autoridades competentes», añade el portavoz de Arcodega, Benito García.

El Real Decreto 105/2008 y la Ley de Residuos establecen que los residuos de demolición y construcción, como cualquier otro desecho, deben ser sometidos a un proceso de valorización y reciclaje «y bajo ningún concepto pueden ser depositados fuera de una planta de tratamiento o sin un gestor autorizado por la Xunta». «Y obviamente, este no es el caso», indican. «Todos los residuos hay que entregarlos como hace cualquier ciudadano con su basura», dicen.