El gobierno local lleva al pleno este proyecto en Meicende
24 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Carlos Calvelo, el alcalde de Arteixo, visitó en febrero As Eiras y anunció un proyecto que pretende acabar con el conocido como «supermercado de la droga de Meicende». Esta iniciativa comenzará a materializarse el próximo jueves cuando se lleve a pleno el expediente de expropiación de varias casas, la mayoría en ruinas, para ampliar la calle y regenerar la zona.
Desde el gobierno local se han reunido con los propietarios de las viviendas afectadas e indican que se han mostrado dispuestos a llegar a un acuerdo, pero de no concretarse se optará por iniciar un proceso de expropiación. La propuesta de la nueva calle, para mantener las alineaciones que tiene la rúa Ecuador en su inicio junto a la travesía de Meicende, se ha presupuesto en 146.000 euros y ya se han realizado los trabajos previos para redactar el proyecto urbanístico.
Eliminación de un problema
«Más allá de las acciones de las fuerzas de seguridad lo que queremos conseguir en As Eiras es la eliminación permanente de los problemas de convivencia que se producen allí, y que se han agudizado en los últimos meses después de que se haya detectado un importante aumento del trapicheo de drogas en esas casas ruinosas», explicó ayer el regidor, que informó de que representantes municipales se han reunido con responsables de seguridad de la Delegación del Gobierno debido a que la Guardia Civil es la que tiene la competencia sobre este tipo de delitos. «También queremos una solución permanente para As Eiras de cara a convertir la zona en un espacio público de calidad», puntualizó el regidor, que considera que con ello se zanja una asignatura pendiente durante décadas.
Los vecinos de Meicende llevaban años reclamando una solución para esta zona y se quejaban de que pese a las operaciones policiales realizadas en As Eiras, zona histórica de trapicheo de drogas, las actividades ilegales continuaban, causando intranquilidad a los residentes en la parroquia y restringiendo el uso de la travesía de Meirás, que sirve de acceso al centro cívico.