Después del derribo del pasado verano, en O Portiño de Suevos todavía quedan seis inmuebles con órdenes de demolición firmes, de las 86 casas que hay construidas en la zona. Entre esos inmuebles se encuentra una vivienda, cuatro galpones y una casa prefabricada cuyos expedientes se iniciaron entre 1993 y el 2003 y en la que la Axencia de Protección da Legalidade Urbanística, dependiente de la Xunta, decretó órdenes de demolición firmes.
Ante esta situación, el edil de Urbanismo, Alberto Castro, reconoció que existe un peligro real de que la piqueta actúe en estos inmuebles, aunque en algunos casos todavía hay esperanza si se reconoce la zona como núcleo rural: «Podrían pararse las demoliciones, aunque no en todos los casos, si se declara O Portiño núcleo rural existente antes de 1988. De todos modos, la Xunta ha paralizado las demoliciones de esta zona a la espera de que Demarcación de Costas se pronuncie sobre la delimitación de este núcleo. Si hay un pronunciamiento favorable, la demolición se para y la Xunta exige legalizarlas y si no se pueden legalizarse se demolerán», dijo. Además de estos inmuebles, en la zona también hay otra vivienda y dos construcciones más con un cierre pendientes del recurso contencioso administrativo.
En cuanto a la delimitación de núcleos rurales de Arteixo, el edil de Urbanismo explicó que la respuesta de Costas se conocerá en enero: «A Xunta está pola labor de recoñecer todo que fora núcleo antes de 1988. Así que se Costas responde negativamente, o seguinte paso será presentar os núcleos ante a Xunta e que os recoñeza. Entón, teremos que remitir a documentación a Costas de novo. Isto pode facer que perdamos un ano, pero débese a un cambio de interpretación entre as administracións», aclaró. Por su parte, el presidente de la asociación de vecinos San Pancracio de O Portiño de Suevos, Emilio Suárez, reconoció que alberga pocas esperanzas de que la zona sea declarada núcleo rural. El Concello está tramitando el reconocimiento de los núcleos de Suevos, O Rañal, Valcovo, Barrañán, Chamín y Sorrizo con el fin de que el deslinde de la costa se reduzca de los 100 a 20 metros.